13 de noviembre de 2007

el yesQuero Nro. 174

Si se calla el cantor

Por
Rafael Rincón Patiño*

Si se calla el cantor calla la vida
porque la vida, la vida misma es todo un canto
si se calla el cantor, muere de espanto
la esperanza, la luz y la alegría.

Horacio Guarany

La democracia es forma y es fondo. El respeto es la forma y los derechos son el fondo. Los procedimientos son tan importantes como los contenidos. Cuando en una cumbre de altos dignatarios habla un presidente la regla es escucharlo, y cuando un presidente es elegido por un pueblo la regla es respetarlo.

Pareciera que el silencio de las colonias y la voz de la metrópoli fuera la norma deseada por la corona española y el fascismo del ex presidente golpista español José María Aznar.

El pregonero español del capital y la desigualdad, el coautor de la guerra preventiva contra Irak, ex presidente José María Aznar, ha sido denunciado en la XVII Cumbre Iberoamericana de Presidentes. La denuncia no se hizo en pergamino, pero la gravedad de los avales públicos de José María Aznar a los golpes no amerita diplomacia alguna. Y la defensa la hizo el jefe del gobierno español con una forma pausada y el Rey Juan Carlos I con un mandato de “¿Por qué no te callas?”

Es lo mismo que quieren los golpistas criollos en Colombia, como el líder gremial Luis Carlos Villegas (presidente de la Asociación Nacional de Industriales, Andi), y el Ministro de Defensa Juan Manuel Santos; ambos apoyaron a Pedro Carmona (“Pedro El Breve”) en su intentona golpista de abril de 2002 en la República de Venezuela.

Los líderes latinoamericanos no son ejemplo de guardar las formas o los buenos modales al momento de hacer sus reclamos. No lo es el colombiano Uribe V. ni lo es el venezolano Hugo Chávez: ambos son bastos cuando de defender sus principios o “inamovibles” se trata. Pero, los líderes de la Metrópoli tampoco son paradigma de respeto a las voluntades nacionales. Con ligereza imponen sus inclinaciones e intereses por encima de la soberanía de los pueblos.

Tampoco es ejemplo de fineza democrática el Rey Juan Carlos de España que espeta al interlocutor pasando por encima de la moderadora, la presidenta socialista Michelle Bachelet, o cuando se retira del recinto, en vez de salir a argumentar, porque un presidente denuncia la corrupción de la empresa española Unión Fenosa en la República de Nicaragua.

En la misma España acaban de acallar a un caricaturista con 3.000 euros por dibujar al príncipe y a la princesa Leticia haciendo el amor, y ser considerada esta conducta un acto de injuria. Los periodistas se quisieron gozar el programa presidencial que otorga 2.500 euros por cada hijo que nazca; un programa equivalente al de familias en acción en Colombia.

¿Y cuál era el fondo del debate? El fondo del “¿por qué no te callas?” lo señaló el presidente Rodriguez Zapatero: por un lado, el respeto a los gobiernos democráticamente elegidos, y por otro lado, el debate sobre la nacionalización de los servicios públicos.

Primero, Rodriguez Zapatero, en una actitud nacionalista, ajena a su talante, se puso a defender lo indefendible, a su antípoda ideológico —quién reconoció públicamente haber apoyado la intentona golpista de abril de 2002 en Venezuela— y cuestionó los epítetos de Chávez contra su compatriota. Chávez Frías, por su parte, denunció la actitud golpista de Aznar y la falta de respeto a la autodeterminación del pueblo venezolano.

Los presidentes están obligados a cumplir las formas y las obligaciones que demanda la diplomacia internacional. Chávez F., tiene que respetar la dignidad española, y Aznar, aún como ex presidente, tiene que respetar la voluntad no sólo del pueblo español sino también la de los otros pueblos, no puede estar cacaraqueando en Washington que Venezuela tiene un “nuevo dictador”.

En cuanto a lo segundo, que es el fondo del fondo, Rodriguez Zapatero manifiesta que la nacionalización de los servicios públicos no es una garantía, llamando la atención sobre los procesos argentino, venezolano y boliviano, a lo cual respondió Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, afirmando que la multinacional española quebró a las nicaragüenses a punta de corrupción.

Salió mal librada España de la XVII Cumbre Iberoamericana: Rodriguez Zapatero quiso relativizar la libertad de mercados y las nacionalizaciones y se encontró con gobiernos ofendidos por las privatizaciones.

Hoy América Latina tiene sus cantores de muy diversos matices, y lo cierto es que no se quedaran callados.

Rodriguez Zapatero quiso darle gusto a la monarquía más que a la voluntad socialista del pueblo español y se rajó. Por más lecciones de inmoderación que le da su opositor Mariano Rajoy, el Presidente español armó la reyerta dialéctica con su “equilibrio” y vana sonrisa y volvió a quedar como un gafe. Chávez aprovechó la oportunidad y quedó más resaltado en la Cumbre la intervención fascista de José María Aznar que la intervención socialista de Rodriguez Zapatero.

Parece que la España del siglo XXI, con la mala sombra de José María Aznar y su abogado de oficio Rodriguez Zapatero, está más lejos de América Latina que de Dios.


* Director de háBeas Corpus, Consultorio de Derechos y Gobernabilidad.


Medellín, 13 de noviembre de 2007


If the singer is silent

Por
Rafael Rincón Patiño*

If the singer is silent, life is silent
because life, life itself is all a song,
if the singer is silent,
hope light and joy die of horror.

Horacio Guarany

Democracy is form and content. Respect is the form and rights are its content. Procedures are as important as contents. When in a Summit of heads of States a President speaks, the norm is to listen to him, and when a President is elected by the people, the norm is to respect him.

It would seem that the silence of the colonies and the voice of the metropolis is the norm desired by the Spanish Crown and the fascism of ex Spanish President José María Aznar, coup supporter.

The Spanish herald of capital and inequality, coauthor of the preventive war against Iraq, ex President José María Aznar, has been denounced at the XVII Latin American Presidential Summit. The plaint was not filed on parchment paper, but the seriousness of Jose Maria Aznar´s support to military coups does not merit any diplomacy whatsoever. And Aznar´s defense was carried out by the Spanish head of state, in a calmed fashion, and by King Juan Carlos I with his mandate, “Why don´t you shut up?”

It´s the same thing our own coup supporters in Colombia, like trade leader Luis Carlos Villegas (President of the National Association of Industrialists Andi) and Minister of Defense Juan Manuel Santos, want; both supported the coup attempt of Pedro Carmona (“Pedro the Brief”) in April 2002, in Venezuela.

Latin American leaders are not an example in keeping up appearances or displaying good manners when they stake their claims. Colombian Uribe and Venezuelan Chávez certainly aren´t: they are both pretty rough when it comes to defending their principles or ¨fixed givens”. But the leaders of the metropolis are no paradigm of respect for the national will either. With superficial disregard, they impose their interests and inclinations on the peoples´ sovereignty.

King Juan Carlos of Spain is also no example of democratic finesse, when he shouts at the spokesperson going above the head of the moderator, socialist President Michelle Bachelet, or when he walks out of the room, instead of standing up and arguing, when a President denounces the corruption of Spanish Enterprise Unión Fenosa in the Republic of Nicaragua.

In Spain itself they have just shut a cartoonist up with a 3.000 euro fine for drawing the Prince and Princess Leticia making love, this handling being considered an insult. The reporters wanted to make fun of the presidential program granting 2.500 Euros to each child born; a program analogous to families in action in Colombia.

¿And what was the content of the debate? The content of “why don´t you shut up?” was spelled out by President Rodriguez Zapatero: on the one hand, respect for democratically elected governments, and on the other hand, debate about the nationalization of public services.

First, Rodriguez Zapatero, taking a nationalist stance, so unlike his usual demeanor, defended the indefensible, his ideological opposite —who publicly acknowledged he had supported the coup attempt in April 2002 in Venezuela— and questioned the terms Chávez was employing against his compatriot. Chávez, on his part, denounced Aznar´s coup-supporting stance and the lack of respect to the self-determination of the Venezuelan people.

Presidents are obliged to keep up the forms and obligations imposed by international diplomacy. Chávez has to respect Spanish dignity, and Aznar, even as an ex President, has to respect the will, not only of the Spanish people, but of the other world´s peoples; he cannot be cawing up and down Washington that Venezuela has a “new dictator”.

In the second place, which is the content in content, Rodriguez Zapatero manifests that the nationalisation of public services is no guarantee, calling attention to the ongoing processes in Argentina, Venezuela and Bolivia, to which Daniel Ortega, Nicaragua´s President, replies that the Spanish multinational forced bankruptcy on Nicaraguan firms via the repeated use of corruption.

Spain did not come out smelling of roses in the XVII Iberoamerican Summit: Rodríguez Zapatero tried to say that market freedom and nationalizations were relative, and came up against governments offended by privatizations.

Today Latin America has singers of many various tunes, and the truth is that they will not be silenced.

Rodriguez Zapatero tried to please the Monarchy more than the socialist will of the Spanish people and he has flunked out. No matter how many lessons in lack of moderation his opponent Mariano Rajoy dishes out, the Spanish President instigated a dialectical battle with his “balance” and bland smil,e and once more he looked like a fool. Chávez took advantage of the opportunity and Jose María Aznar´s fascist intervention received more attention than Rodríguez Zapatero´s socialist intervention.

It would seem that 21 Century Spain, with the rotten shadow of José María Aznar and his lawyer appointed by the State, Rodriguez Zapatero, is farther away from Latin America than from God.


* Director de háBeas Corpus, Consultorio de Derechos y Gobernabilidad.


Medellín, 13 de noviembre de 2007

30 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Dr. Rafael. ¿Qué hacía Fajardo con el representante de las empresas de telecomunicaciones españolas, José María Aznar?

¿Estará vendiendo a Une telecomunicaciones?

Anónimo dijo...

CAMBALACHE

El rey que rabió

Daniel Samper Pizano. Columnista de EL TIEMPO.
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Para ser Bolívar en el siglo XXI no es preciso ser valiente, solo mal educado

Notas y precisiones sobre el incidente entre Juan Carlos I y Hugo Chávez.

La mayoría de los españoles piensa que, al decirle "¿Por qué no te callas?", el rey puso en su sitio la grosería de Hugo Chávez. Mientras tanto, la mayoría de los venezolanos considera que Chávez es un héroe bolivariano que derrotó nuevamente a la corona española.

El incidente ocurrido en la XVII Cumbre Iberoamericana merece algunas precisiones. Digamos, para empezar, que parece fácil ser Bolívar en el siglo XXI: no es preciso ser valiente, solo mal educado. Tampoco aciertan los que contrastan a Chávez como presidente elegido democráticamente y al rey como representante de una institución mandada a recoger. Pienso que las monarquías son un sistema anacrónico, pero debo reconocer, aun a riesgo de que mi querida Gloria Gaitán me llame cipayo, que a los españoles les ha funcionado muy bien la monarquía constitucional. Por lo demás, la autoridad del rey nace de la Constitución de 1978, aprobada en referendo por el 95 por ciento del pueblo español, que habría podido repudiarla.

Chávez no está en condiciones de impartir lecciones de democracia a Juan Carlos de Borbón. En 1992, el venezolano intentó asestar un cuartelazo a un gobierno -bueno o malo, pero democráticamente elegido-, y fracasó. En cambio, Juan Carlos desmontó en 1981 un golpe de Estado contra la España renaciente y consolidó así la transición hacia la actual democracia que, sin su decidida intervención, seguramente se habría ido al traste.

Otra aclaración: es un error imaginar que en este rifirrafe Chávez representa la libertad de expresión y el rey, la censura. Todo lo contrario: quien tenía la palabra era el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, y fue Chávez el que, de manera cansona y constante, lo interrumpió y perturbó. Lo que hizo el rey fue pedirle a Chávez que respetara el turno de Zapatero. Se dice que, al hacerlo, el rey faltó a la diplomacia. Conociendo la fama que tiene de personaje sencillote y espontáneo, era de esperar que le hubiera dicho al impertinente Chávez: "¡Calla la boca, coño!". Pues claro que fue diplomático: por eso se limitó a increparle: "¿Por qué no te callas?", equivalente a "Déjelo hablar, hombre".

Observen la escena con cuidado y verán que, distinto a lo que dice la derecha española, el rey no defendió a Aznar de las descalificaciones de Chávez. Lo defendía -¡qué paradoja!- su más caracterizado antagonista político, el socialista Rodríguez Zapatero. A mí tampoco me gusta Aznar (en mis peores pesadillas sueño que me toca escoger entre Aznar y Chávez), pero no veo qué relación existe entre la vieja pelea de Chávez con este hombre, ya derrotado y retirado de la política, y las conversaciones iberoamericanas sobre cohesión social. Adivino allí un acto ególatra del presidente venezolano, obstinado en recordar el condenable intento de golpe que sufrió hace cinco años, pero no el que propició él hace 17. (Para que sepan cómo andan las cosas en España, el partido de Aznar culpó a Zapatero de los dicterios de Chávez, en vez de agradecerle que defendiera a su antiguo jefe!!)

El último despropósito de Chávez es pretender sembrar sospechas en el sentido de que Juan Carlos I apoyó el frustrado golpe contra él. Debería saber que el rey no traza las políticas de gobierno; su papel constitucional es el de certificar, representar y actuar a petición del ejecutivo.

Pese a su populismo, Chávez ha aportado cosas interesantes a América Latina: un interés por lo social, un balance frente a los abusos de Estados Unidos, unas mediaciones políticas que eventualmente ayudarán a la paz en Colombia. Pero debe entender que las reuniones internacionales de Jefes de Estado no son Aló, presidente, donde dice lo que le sale de la boina, y que no todo el mundo tiene por qué aguantarse sus arrogancias de chafarote.

cambalache@mail.ddnet.es

Daniel Samper Pizano

Anónimo dijo...

discrepancia absoluta en la forma de ver la cumbre, veo por tu Yesquero. Lo que más me preocupa a mí de todo este rollo y los rollos concomitantes es que Chávez, a quien considero un lastre para la democracia y no un adalid suyo, es defendido por gente tan verraca y consecuente como tú...eso me para los pelos. Por supuesto que las formas importan, cómo pueden no importar para un abogado y defensor de derechos humanos... o para cualquiera con dos dedos de frente aunque tenga capul.

Creo que a América Latina el sarampión de izquierdismo que ahora la aqueja y cuya roseta más roja e incendiada es Chávez no le está dejando ver los árboles por el bosque la democracia. Estoy de acuerdo en todo lo que sea LUCHA DIGNA y reivindicaciones, protestas, denuncias, todo lo que constituye la salvaguarda del ser humano frente a los capitales inhumanos. Pero no puedo tolerar que ahora sea tan políticamente correcto rajar de Aznar y elogiar a Chávez, pues para mí los dos son del mismo tipo de FASCISTAS. O todos en la cama o todos en el suelo.

Nos merecíamos más, en América Latina, que ese pobre remedo de presidente que va por ahí cantando rancheras y saboteando micrófonos como un niño empecinado en que la piñata tiene que caerle toda encima a él y a nadie más que él. Con lo bueno que es que la inteligencia POR FIN esté llegando a los foros internacionales, que POR FIN podamos tomar la palabra, para que se dediquen estos ratos ganados a pulso con TANTA SANGRE AJENA Y PASADA (al papayo) a inflar los egos de los dictadorcitos de turno, con su envoltorio de democracia para el consumo masivo. A mi Uribe y Chávez, se me parecen demasiado como para atacar al uno y al mismo tiempo defender al otro!

Anónimo dijo...

Estimado señor : francamente, al comenzar a leer su artículo, me dije: "lo único que falta es que el amigo Rincón Patiño sea "chavista". Estoy aliviado de ver su imparcialidad en sus comentarios.
Usted, mi amigo, se ha negado a denunciar la dictadura de los hermanos Castro. Ojalá entendamos, por otra parte, que la famosa "revolución bolivariana", aparte de ser un desvarío ideológico, promueve la división social, critica todo hasta la saciedad, y lo que es peor, provoca a todo aquel que sugiere una crítica,provoca a países, provoca a otros gobernantes, insulta, promueve el caudillismo, el partido único, etc. Es decir, estamos frente a un verdadero fascismo bananero.
Esto, sin considerar que no propone nada que sea en beneficio de país alguno, y sigue traficando con dólares y petróleo.
Mucho me temo que esta aventura "bolivariana", una vez más, tenga su epílogo con la sangre de algunos incautos que creyeron en esa nada, mientras los dirigente huyan. A países capitalistas, claro.

Anónimo dijo...

Rafa

YesQuero Mayor



¡Nojoda! los pájaros tirándole a las escopetas.

Qué tal que el invitado te mande a callar en tu propia casa.

Si el Presidente Uribe acolita y agacha la cabeza. Es su problema. Chavez hizo lo que tenía que hacer y estoy seguro que si hubiese estado al lado del Monarca de los Españoles.... le

pega su coscorron.

Orlando EMR

Anónimo dijo...

RAFAEL MUY BUEN DIA....NUEVAMENTE FELICITACIONES POR TUS ESCRITOS, REALMENTE CARGADOS DEL PENSAMIENTO E IDEOLOGIA QUE TE CARACTERIZAN. TE COMENTO QUE EN LAS PASADAS ELECCIONES LOGRE COLOCAR MI CONCEJAL CON MUCHO TRABAJO EN LA CORPORACION TULUEÑA, HEMOS QUERIDO CON MI SOCIO POLITICO EMPRENDER UN PROYECTO A PUBLICARSE SEMANALMENTE. ES UNA ESPECIE DE BOLETIN POLITICO, PERO CON UN TINTE SATIRICO CON RESPETO, LO HE QUERIDO BAUTIZAR "LA RANA VIAJERA" HACIENDOLE UN HOMENAJE A JULIO CAMBA, QUISIERA QUE EN ALGUN MOMENTO PUDIERAS ESCRIBIR COMO INVITADO O ME PERMITIERAS DIFUNDIR TUS COMENTARIOS "COLUMNA" EN EL BOLETIN. CUALQUIER AYUDA LA AGRADECERIA Y CUALQUIER IDEA CON MAYOR RAZON.

Anónimo dijo...

Excelente escrito. Sin alabanzas a Chávez se destaca la necesidad del respeto que tienen los reyes y los plebeyos.

Ana Lucía Gutiérrez

Anónimo dijo...

CAPÍTULO IV

"Liderazgo

Querido Santiago:

Ya que me preguntas directamente qué es gobernar, te contestaré con la misma claridad: gobernar es decidir. No a todo el mundo le gusta, ni tiene por qué gustarle. Es un privilegio, y a veces una servidumbre.

Comentas que los instrumentos que las sociedades modernas ponen a disposición del gobernante son al mismo tiempo formas de neutralizar su acción. Por lo que veo, no te fías del todo de ésta. Tienes razón. Haces bien en recordar los consejos que algunos sabios orientales daban a los gobernantes, como es dejar que la realidad siga su curso o interferir lo menos posible en la naturaleza de las cosas. Aquellos hombres, como sugieres, no debían haber perdido del todo el sentido del humor. Pero yo estaba hablando de otra cosa, que no es incompatible con tu observación. Y es de cómo los instrumentos al servicio de la acción política, tan gigantescos hoy en día, sirven para esquivar la responsabilidad de quien debería asumir las consecuencias de sus acciones. Cuando se toma una decisión, cuando se decide, se debe hacerlo con todas las consecuencias.

La ciencia, la técnica, el derecho o la administración hacen posible la política, pero conviene recordar que ésta no se reduce a ninguno de ellos; mucho menos los sondeos, instrumentos deseables siempre y cuando no se conviertan en la finalidad de la actividad política. Uno de los males europeos actuales es precisamente la incapacidad de la política para liderar todos estos aspectos, encauzarlos, dirigirlos en provecho de las personas. En muchas ocasiones he repetido lo preocupante que es la falta de liderazgo en la política y la sociedad europeas. La política corre peligro de convertirse en una eterna deliberación, en un continuo discurrir sobre el discurso imperante o en la mecánica adopción de medidas científicas o jurídicas.

Cuando pierde de vista la decisión que le da sentido, se produce su perversión, la disolución de la acción política. Pero existe otra forma de entender mal el liderazgo. Es el caudillismo, la conducción de un país en nombre de unas cualidades supuestamente excepcionales y que sólo estarían en manos de una persona. Todavía hoy encontramos ejemplos de fascinaciones colectivas ante determinadas personalidades, fascinaciones que van acompañadas de una mal disimulada deriva hacia el totalitarismo. Estoy pensando en algunas naciones de Iberoamérica, por ejemplo. La figura del caudillo apela siempre a la acción y al pueblo, pero desprecia el hecho de que, en una sociedad abierta, la decisión sólo se toma tras la deliberación y la discusión libre y razonada de los ciudadanos. Es algo así como el extremo contrario de lo que te hablaba antes: la acción sin deliberación racional y libre, la actividad política eximida de principios ajenos a la decisión del político.

Frente a la disolución de la política y al caudillismo, creo que es necesaria una reivindicación del liderazgo. El liderazgo se opone al caudillismo porque se reconoce a sí mismo al servicio de una sociedad a la que sirve y de la que depende. Busca perpetuar todo lo que el caudillismo populista odia: la libre discusión, la libre deliberación, la libertad de conciencia que supone. El liderazgo se opone también al otro extremo, al de la disolución de la política en una eterna deliberación y una interminable discusión. Contra el caudillismo, el auténtico liderazgo basa su política en principios. Contra la disolución política, muestra la convicción como elemento fundamental.

Para evitar el caudillismo, el liderazgo necesita principios. Esos principios no dependen ni de las preferencias de cada uno, ni siquiera de su utilidad. No se agotan en ocurrencias temporales pergeñadas para solucionar momentáneamente un problema o ganar unas elecciones. No se trata de proyectos meramente administrativos o técnicos. También constituye un error pensar que los principios a los que me refiero son una pura abstracción sin relación alguna con la acción real. Más aún, la apelación a principios abstractos y gloriosos, que de hecho pueden significar cualquier cosa, es propia tanto de la acción totalitaria como del cortoplacismo político.

En otras palabras, no basta con hablar de democracia. Hay que concretar a qué nos referimos, qué instituciones, cómo están organizadas, quiénes las dirigen. En nombre de la democracia se pueden hacer y decir muchas cosas, algunas aberrantes, pero el parlamentarismo, el Estado de Derecho, la separación de poderes o el derecho a la vida son cosas bastante más concretas y que exigen al político un comportamiento muy determinado. En política, no sólo se trata de escuchar qué se va a hacer, sino en ver qué se hace realmente. Así se plasman esos principios, y así pueden ser juzgados.

El siglo xx nos ha dejado enseñanzas incuestionables. Una de ellas, que en nombre de la democracia se pueden establecer dictaduras atroces. En nombre del parlamentarismo, de la libre elección de representantes y de las elecciones periódicas, es imposible hacerlo. Cualquiera puede clamar por la justicia; pero el Estado de Derecho, el imperio de la ley, la igualdad de todos ante las leyes, pobres y ricos, hombres y mujeres, funcionarios o no, es difícilmente escamoteable. Los verdaderos principios no son ideas abstractas alejadas de la realidad. Son ideas que nos proporcionan una imagen concreta y visible del mundo al que se refieren. Son, si me permites expresarlo así, difícilmente falsificables porque se muestran cada día en la actividad política.

Pero no basta con tener las ideas claras, me temo. Hace falta tener convicción en ellas. Nadie discutirá a estas alturas el hecho de que la democracia es el mejor régimen posible, o al menos el menos malo. Pero ¿quién está dispuesto a defenderlo en cualquier lugar o circunstancia? En muchos países del mundo se persigue a las personas en nombre de ideologías o religiones; en nuestras propias sociedades se producen agresiones culturales o políticas contra principios respetables.

El liderazgo incluye la fuerte convicción en que, pese a todas las dificultades, se trata de principios correctos. Si se da esta convicción, ella misma nos lleva a la acción, a su defensa, a su propagación. Va acompañada de otras virtudes, de las que ya te he hablado: la responsabilidad acerca de los actos y las opiniones propias, la coherencia, la pasión y el ardor intelectual o político. Y requiere otra, que es la voluntad. En esto, Santiago, no vale intentar engañarse a sí mismo. Sin la voluntad que sostiene el trabajo constante, la disciplina de todos los días, la consistencia en la conducta y la capacidad para rechazar atajos, caminos más sugestivos más fáciles, nada de lo anterior es posible.

Es la capacidad de liderazgo que Juan Pablo II mantuvo hasta el final de su vida. Tuvimos el privilegio de observarlo en España en 2003: un anciano que, a pesar de sus achaques y su sufrimiento, conservaba toda la fuerza de sus creencias. Cuando el pensamiento único habla de laicismo y descreimiento, aquel viejo Papa se plantó en mitad de una de las grandes capitales europeas e invitó a recuperar la fe y la convicción en unos ideales. Y consiguió reunir en torno a sí a cientos de miles de personas, que sumaron decenas de millones por el mundo. ¿Cuántos políticos o artistas de renombre son capaces de reunir a tantas personas? El patrimonio de aquel hombre no consistía más que en la creencia en unos valores universales y la determinación necesaria para defenderlos siempre y en todo lugar.

Recuerda que, entre el cinismo y el desprecio, Stalin preguntaba cuántas divisiones tenía el Papa. En 1989, viendo el descalabro soviético por televisión, me pregunté dónde estaban entonces todas las divisiones de Stalin. Pese a tener un poderoso ejército, pese a contar con el apoyo irresponsable de no pocos en Occidente, el aparato ¿o los apparatchiks, como los llamaban¿ se vio arrollado por un desorganizado ejército de perseguidos y represaliados políticos, más de uno encarcelado, torturado, malherido para siempre, que dieron la batalla desde la determinación, la convicción y el aguante. Se las comunicaron a la gente común y algunos de ellos, Lech Walesa, por ejemplo, tuvieron ocasión de llevar a las instituciones esa fortaleza de ánimo.

Pero no basta, naturalmente, con tener fuertes convicciones. Lo que diferencia a la política de la ciencia, la filosofía o la historia es que es, ante todo, un arte práctico. Aunque ambas cosas no están separadas. En realidad, el paso de las convicciones a la acción no es difícil, pero sólo quien tiene convicciones es capaz de darlo.

Se habla mucho de consenso. El consenso es fundamental para los grandes asuntos que afectan a la convivencia o a las instituciones del Estado de Derecho. Es indispensable en Justicia, o, en nuestro país, en un asunto tan complicado como la financiación autonómica. Pero fuera de eso el consenso es un instrumento, que puede ser útil o no. No es un objetivo en sí mismo ni suprime los problemas ni evita la responsabilidad de cada cual. Teniendo claro aquello que funda la democracia, conviene también tener claro lo que cada uno quiere y ofrece a la opinión pública.

De aquí se desprende una virtud política indudable: la seriedad. La política es un asunto serio, muy serio. Resulta algo evidente y sencillo, pero nunca se repite lo bastante: la política es una actividad que debe estar presidida por la conciencia de su alcance, que incluye a la propia sociedad, el futuro de esa misma sociedad, y también a otras naciones.

La seriedad y la responsabilidad nos llevan a otro elemento del liderazgo. Lo forman la deliberación, la meditación, la reflexión minuciosa. Los que hemos tenido responsabilidades de gobierno sabemos que a veces hay que tomar decisiones urgentes. Otras no siempre gozan de un amplio respaldo en los sondeos de opinión. En cuanto a las primeras, la mayor parte de las decisiones de urgencia serán más fáciles de tomar si el escenario y el guión están previamente meditados. En cuanto a las segundas, conviene tener bien claro que hay decisiones que no se pueden tomar bajo la presión de las encuestas o los medios de comunicación.

Las encuestas y los medios de comunicación son irreemplazables en una democracia. Está bien que se creen medios de participación de la ciudadanía, aunque teniendo siempre una cautela: que esos órganos no deberían tener capacidad de decisión porque no están elegidos, ni responden ante el público. Cada cual tiene un ámbito de acción, y el político no puede delegar el suyo en nombre de la popularidad. El político es el que, al final, toma determinadas decisiones. Para eso le han elegido. Por eso el político, si aspira al liderazgo, también ha de aceptar las consecuencias de sus decisiones hasta el final, por ingratas que sean. Hoy estamos demasiado acostumbrados a que las decisiones no se tomen de manera razonada y razonable, y a que no se afronte con responsabilidad sus consecuencias. Este miedo al futuro hace que la decisión en el presente se paralice, que no se delibere correctamente sobre ella, que se disuelva la acción para disolver las responsabilidades. Hay quien no soporta la soledad, Santiago. Tal vez te parezca paradójico, pero en tal caso es mejor no dedicarse a la política.

La acción tomada con convicción implica también la dedicación y el compromiso. Dedicación total y compromiso intenso. No se puede aspirar a gobernar un país a tiempo parcial, o negarse a asumir las responsabilidades de las propias decisiones. Tú ya debes saber, Santiago, lo que es tomar una decisión. Supone estar dispuesto a mantenerla en el futuro y a aceptar las consecuencias y los compromisos que se deriven de ella. En la política no es del todo distinto, aunque la presión sea mayor. Pero precisamente por eso, tanto la dedicación como el compromiso que se exigen sólo son posibles cuando se tiene una vocación inequívoca de servicio público. También implican fortaleza de ánimo, paciencia con los resultados y capacidad de delegar y crear confianza a tu alrededor.

Seriedad, responsabilidad, voluntad, dedicación y compromiso. También, confianza: que los demás sepan que pueden confiar en ti, que no les vas a fallar. Ésas son, a mi entender, las virtudes de un líder. En la historia, no son pocas las figuras que han sabido ejercer el liderazgo, y que son ejemplo para nosotros. Winston Churchill fue capaz de llevar a cabo esta síntesis de convicciones profundas y capacidad de decisión en momentos difíciles. Cuando la desidia y la irresponsabilidad eran denominador común, Churchill apeló a los valores morales e históricos de la nación. Esta apelación puso en pie a Gran Bretaña y los ingleses contuvieron en su país, y en realidad en toda Europa, al totalitarismo nazi. A Margaret Thatcher no le disgustaba el mote de «dama de hierro» que le había puesto Brezhnev, el burócrata soviético. No ejerció su liderazgo con menor seriedad, responsabilidad, dedicación y compromiso que su antecesor. Y en algunos momentos, cuando tuvo el valor de resistir las huelgas y los sabotajes, lo hizo con un tesón y una determinación sin parangón.

En España hemos tendido a menospreciar las virtudes de algunos de nuestros grandes líderes políticos. Por ejemplo, no se recuerda a Cánovas como el artífice de un nuevo partido liberal conservador y de un régimen de libertades que, con todos los defectos que se quieran, proporcionó a España muchas décadas de estabilidad institucional. Durante bastantes años, Cánovas asumió solo todos los riesgos. Como sabes, lo asesinó un terrorista. Antonio Maura es otro de los grandes líderes políticos de nuestra historia. Se empeñó en que todos respetaran, como él lo hacía, la virtud sagrada de la ley y de las instituciones. Sabrás cómo le respondieron, con una campaña feroz de difamaciones y mentiras, y una coalición que duró exactamente lo que tardó en quitarse a Maura de en medio. Todavía hoy se escucha el eco de aquel grito de «¡Maura, no!», que era el único programa de la oposición. Echaron a perder una oportunidad histórica para recrear la democracia en España, tumbaron a un gran político que estaba en condiciones de aportar grandes cosas a su país, pero no consiguieron doblegar la voluntad y la decisión de don Antonio.

Me dirás, Santiago, que estas virtudes no siempre son fáciles de encontrar y llevar a la práctica. Al fin y al cabo estas figuras son excepcionales. Y estoy de acuerdo contigo. No siempre es posible encontrarlas porque al fin y al cabo, el político es un ser humano, sujeto a las limitaciones y también a las debilidades de la condición humana. Al fin y al cabo, el mismo Churchill no fue capaz de ver el límite de su política y no supo retirarse a tiempo. Además, los políticos no representan, como reza la vulgata marxista, grandes corrientes históricas de las que son la manifestación necesaria. Son personas, y como tales su influencia dependerá en buena medida de ellos mismos, de su capacidad de acción y de su determinación. Pero valgan al menos como ideales, como horizonte intelectual y moral para el político. Además, todos compartimos una enseñanza bien sencilla: equivocados o no, las decisiones que hemos adoptado son las nuestras y de ellas debemos responder a la sociedad a la que servimos. Nada nos exime de esa responsabilidad, que es la base de la vida de todos los días, con independencia de la amplitud de las consecuencias de la acción de cada uno.

Recibe un fuerte abrazo,

José María Aznar"

'Cartas a un joven español' -
Jose María Aznar -
Editorial Planeta -
203 páginas.

Cortesía Editorial Planeta

Anónimo dijo...

El análisis y la crítica política deben ser imparciales y mesurados. Su extrema posición de mamerto, apesta, pues solo parece estar de acuerdo con quienes pretenden imponer sus “ideas” a base del volumen de sus gritos y de su grosería, como el guerrillero Chávez.

Anónimo dijo...

Desgraciadamente, esta historia Chávez acabará, me temo, en sangre.

Anónimo dijo...

De tanto en Tanto, leo este blog, particularmente hoy creo que el analista ha entrado en lugares habitualmente inexpugnables por aquellos que en Europa te señalan de ser de un continente donde la corrupción campea, pero no se preguntan por la tarea de sus corruptoras empresas, nombres, Simens (1100 millones de euros reconocen hoy que se pagarano recientemente en corruptelas), France Telecom y sus operaciones en Centro América llevaron a la cárcel a más de un expresidente apenas hace unos años, ahora Union Ferosa, y la lista es extensa, así que de tanto en tanto y saltando sobre la diplomacia no esta del todo mal mostrarle al lobo su fea dentellada.
Alejandro Vakèen

Anónimo dijo...

Ah Rafael si se calla el cantor...... tu eres un buen ejemplo de que el cantor jamàs se acabarà filicitaciones y mil gracias por tus aportes y es en buena hora.
Con respeto y afecto
Héctor Torres

Anónimo dijo...

REVISTA CRÍTICA POLITICA



Noviembre 2007


Un rey que no es rey pero se cree rey.


El Rey Español manda callar al Presidente Chavez


Europa, continente en decadencia así posea un poder relativamente grande aún en el mundo, posee unas sociedades que ideológicamente no han podido superar el ciclo feudal de la Historia. En efecto, países como Inglaterra, España, Bélgica, Holanda, Suecia y otros más, tienen reyes y príncipes, reducto de siglos atrás cuando el poder político era considerado de origen divino y la teocracia imperaba en todo el continente. De esa teocracia derivó la conquista de territorios en el resto del mundo y el coloniaje a que lo sometieron, como a nosotros el imperio de las monarquías españolas.

Pues bien, se ha venido llevando a cabo una serie de eventos llamados “Iberoamericanos” a los cuales son llevados los presidentes de los países que fueron colonias de España; en esos eventos se trata diversidad de temas que casi siempre terminan en propósitos inanes. España es la que los organiza y financia porque de ellos deriva ganancias en el comercio con sus excolonias que ahora son neocolonias del capitalismo globalizado. En el evento último se ha presentado un incidente entre el Rey español y el Presidente Chávez con ocasión de una referencia política que éste hizo respecto del anterior jefe de gobierno español, el conservador Aznar, a quien el actual jefe de gobierno, siendo socialista, defendió del ataque de Chávez. El Rey le dijo a Chávez que se callara cuando éste sostenía el ataque a Aznar.

La conducta del Rey se enmarca dentro de esa tradición teocrática, propia de las monarquías feudales, porque los reyes europeos actuales son apenas objetos de decoración política de sus respectivos gobiernos. Es decir, no tienen poder real pero siguen siendo considerados como personajes que sostienen el dominio ideológico sobre sus pueblos y, en esa forma, legitiman el capitalismo que domina en ellos. Al Rey se le salió el Fernando VII que nos gobernó con Inquisición y todo en las épocas de la colonia y actuó pensando que aún somos sus súbditos y los gobernantes actuales una especie de Virreyes coloniales.

Sin embargo de lo que Chávez dijo luego, no es suficiente. Chávez ha debido denunciar ese dominio ideológico de la realeza europea que corresponde al actual imperio del gran capital que no es solo el norteamericano sino también el europeo. Ha debido aprovechar para indicar el coloniaje histórico de nuestros pueblos y el saqueo de nuestras riquezas gracias a lo cual esos países colonialistas se encuentran en condiciones económicas superiores a las nuestras y que nos siguen explotando ya no con la espada, el arcabuz y la cruz, sino con la invasión de las grandes corporaciones multinacionales. Ya no es la Hansa que se recrea por todos los continentes sino el Banco Santander, la Telefónica de España, el Banco BBVA y cientos de empresas españolas que extraen inmensas ganancias de nuestro continente y lo siembran de miseria y pobreza, como en el anterior coloniaje de salvaje violencia sobre nuestros indígenas y nuestra Historia.

Y algo más, el jefe de gobierno español, Rodríguez Zapatero, hizo de bufón: representa al partido socialista español. Qué clase de socialismo será ese que tiene Rey y que reconoce su legitimidad ideológica de carácter feudal; qué clase de socialismo puede ser el que defiende a un fascista como Aznar sustentando, esa defensa, en un nacionalismo o patriotismo que también ha sido trascendido por la evolución de las sociedades humanas. Chávez no pudo ir a la esencia, lo ideológico, del incidente que protagonizó un Rey que es algo decorativo pero que cree que aún tiene poder gubernativo. Es porque Chávez no ha podido profundizar en la Historia de nuestros pueblos y apenas hace discurso

Anónimo dijo...

Hola Rafa,
Aunque soy uno de tus seguidores, hoy no estoy contigo en lo de Chavez. sin considerar que sea un facho ni nada parecido, pero, lo cortés no quita lo valiente, y creo que de política de agravios personales ya estamos hasta el cuello. Comparto más esta visión de Daniel Samper que te envío.

Anónimo dijo...

Apreciado Rafael:

Generalmente estoy de acuerdo con sus puntos de vista, los cuales retransmito. Pero esta vez, tal vez esté de acuerdo con el "fondo" mas no con la "forma".

Es posible que Chávez tenga toda la razón en lo que dice (aunque carezca de autoridad moral para criticar a un golpista, cuando él mismo fue un golpista fallido de un gobierno constitucional, hace muchos años). El que tiene techo de vidrio no debe tirarle piedras a la casa del vecino...

Las reglas de un debate se fundamentan en el respeto al uso de la palabra. Y el error de Chávez no fue necesariamente decir lo que dijo, sino interrumpir, en una muestra más de su pésima educación, a quien tenía el uso de la palabra. Entre personas civilizadas, las interpelaciones se solicitan respetuosamente, no se toman a la fuerza. El Rey de España tampoco debió mandarlo a callar. Debió solicitarle a la Presidenta de la Reunión que moderara e hiciera respetar el uso de la palabra.

Perdone Ud., pero es que Chávez pierde mucho al ser "más ordinario que un condón de fique"... Después explicó a unas periodistas que se había retirado precipitadamente porque "no aguantaba las ganas de orinar" (!) Una cosa es que yo, como costeño, diga ante mis amigos: "Ñerda loco, espérame, que tengo una meada del carajo" a que me exprese en similares términos ante unos periodistas, siendo Presidente de una República. La dignidad de un cargo impide que se exprese con tal ordinariez. Los ejemplos sobran, como cuando a través de las cámaras de TV dijo que su esposa cumplía años ese día, y le dijo: "Mija, prepárate, que ya sabes cuál es el regalo que te voy a dar esta noche" ( !!!)

No nay nada que hacer con este personaje al que mucha falta le hace un pulimento educativo. Se comporta como un corroncho absoluto. Se ve que nunca leyó los decimonónicos preceptos de su compatriota Carreño...

Daniel Samper publicó hoy una columna sobre el tema. Vale recordar a, creo, Proudhome: "El estilo es el hombre"

Atento lector,

Ramiro Arteta
Barranquilla

Anónimo dijo...

Genial. Me gusta la metáfora.



HM

Anónimo dijo...

oye, viejo rafa... excelente título. oportunísimo. "cantor que canta bajito tiene miedo o poca voz... el rifirafe en son de rafa!! saludos. te mando lo de unomas--- rey-no

Anónimo dijo...

Mi Rey contra Chávez:
Llamado de auxilio al pueblo venezolano y al español





Por: Jon Juanma Illescas Martínez(*)
Fecha de publicación: 11/11/07



Soy un ciudadano español y me siento angustiado. Resulta que el Jefe de Estado de mi país nunca se ha presentado a ninguna elección, ya que es Rey, justo ese tipo de gente que como bien es sabido no tienen por costumbre presentarse a ninguna elección o referéndum para ocupar el puesto más alto en la dirigencia de un país. Pero supuestamente, mi Rey, me representa como ciudadano (súbdito) del Reino de España, allende los mares. Si no me gusta su política no puedo votar por otro. Aún así, no cesan de repetirme por TV que vivo en un país democrático en el que somos envidiablemente libres. Debo tener algún problema de entendimiento grave porque yo pensaba que la democracia era el poder del pueblo y que con este sistema era él mismo quien decidía su futuro. Ahora mi Rey nos ha metido en un lío con otro país hermano, la República Bolivariana de Venezuela, hablándole a otro jefe de estado, a Hugo Rafael Chávez Frías del mismo modo que un padre autoritario a su hijo pequeño, diciéndole con tono enojado e imperativo: “¿Por qué no te callas?”. Este gobernante, por cierto, sí democráticamente elegido por tres ocasiones. Llegados a este punto, ¿qué puedo hacer como ciudadano si no me siento representado por mi Rey? Pues poca cosa y verán porqué.

Desde 1939 a 1975 el pueblo español sufrió la atroz Dictadura de Franco, genocida de extrema derecha, amigo entre otros de personajes tan insignes como Mussolini o Hitler. En 1975 el tirano murió en la cama sin pagar por sus crímenes. En ese momento y ante las múltiples huelgas obreras y manifestaciones estudiantiles, la dirigencia reformista del régimen franquista entendió que para acceder al mercado europeo y llevarse parte del pastel capitalista debía reformar el sistema ya que la Unión Europea jamás admitiría una dictadura como país miembro. Así las cosas y como dice el historiador Bernat Buniesa, la dirigencia reformista capitalista española eligió seguir un camino de reformas en “que todo cambiará para que todo siguiera igual”. De esta manera y con la ayuda del capitalismo internacional, la CIA, el Club Bilderberg, el Club de Roma y demás élite de la “Internacional Capitalista”, consiguieron comprar de una forma más o menos disimulada a los líderes de los partidos de izquierda de este país y desmovilizar consiguientemente a las masas que pedían cambios mucho más profundos en el sistema político y económico. A todo esto, mi Rey, elegido por Franco como su sucesor, fue presentado por arte de magia como paladín de la democracia y apasionado reformista constitucionalista (él mismo que había jurado los principios del movimiento y su adhesión a Franco).

Así las cosas, la oligarquía española tuvo la “delicadeza” de redactar una nueva Constitución con la ayuda de los líderes de izquierda más reconducidos y permitir al pueblo español elegir entre aprobarla en referéndum o no. O sea, le dio la posibilidad de continuar con todo el sistema franquista de siempre o cambiar hacia una monarquía parlamentaria capitalista. Dos opciones. Sólo dos. Era como si la oligarquía española a modo de padre autoritario le dijese al niño pueblo, ¿qué prefieres, que te siga pegando con la correa o que ahora lo haga con la mano? Evidentemente el pueblo español prefirió con la mano. Prefirió elegir la nueva Constitución que aún siendo bastante conservadora garantizaba un marco jurídico mínimo de libertades ciudadanas y derechos políticos, derechos inauditos en este país europeo desde que ganara la Guerra Civil Franco en 1939. La Constitución de 1978 vigente actualmente fue aprobada con una abstención del 32,89% y de los votos emitidos con un 87,87% de afirmativos. En Catalunya la abstención casi llegó a la mitad de la población y en Euskadi (País Vasco) la superó con el 55,50%. Y por cierto, el referéndum fue en bloque a diferencia del que se hará en diciembre en Venezuela. A los españoles de entonces se les permitió o seguir con el franquismo sin Franco o aceptar todo el paquete de la nueva Constitución de 1978 con Monarca incluido.

Desde entonces pan y agua, y también mucho circo por supuesto. Nadie ha preguntado al pueblo español si quiere o no Monarquía y es muy posible que esto siga así, porque los dos partidos principales, el PSOE (desde el centro-izquierda siendo muy bien pensados hasta el centro derecha) y el PP (desde la extrema derecha al centro-derecha, en todo caso ultraliberales), son partidarios de este sistema propio del feudalismo. Esto forma parte del consenso que se llamó Transición pero que los socialistas honestos debiéramos llamar Restauración Borbónica como correctamente ya han apuntado algunos historiadores.

Desde estas humildes líneas quiero hacer un llamado al pueblo venezolano y al español advirtiéndole de diferentes peligros.

Al pueblo hermano de Venezuela le quiero decir (como ya supongo que una gran parte de él sabrá) que este acto ocurrido con “mi Rey” no es más que parte de la gran obra teatral que verán representada a lo largo de la campaña electoral hasta el día del referéndum. Obra de teatro patrocinado por la Oligarquía capitalista internacional que a diferencia de los trabajadores, tienen un nivel de internacionalismo de clase envidiable. No es más por tanto, que uno más de los intentos desestabilizadores que están orquestando contra la Revolución Venezolana y la Reforma Constitucional que sin ser verdaderamente socialista, camina con decisión rumbo al socialismo. Así que animo al valiente pueblo revolucionario venezolano que no de su brazo a torcer porque somos muchos los que en el mundo estamos a favor del proceso y por supuesto, entre ellos, muchos españoles. Ciudadanos (o vasallos en nuestro caso) que no tenemos voz por estar los medios masivos de comunicación de nuestro país, todos, en manos de capitalistas que obedecen sus internacionales intereses. Del mismo modo, alerto al pueblo venezolano que no pierda de vista una de las dimensiones más importantes del socialismo, el Internacionalismo, la hermandad activa, la solidaridad y el entendimiento real con el pueblo trabajador de cualquier parte del mundo. Que no se deje llevar por el fácil chovinismo anti-europeo, anti-español y piense que aquí todos estamos a favor de “nuestro Rey”, ya que como he dicho NINGÚN español votó por él y si algún día se hiciera aquí un referéndum al respecto, seguro habría más de una sorpresa, porque si no créanme ya lo hubieran realizado para legitimarlo. Que los venezolanos no piensen siguiendo el paradigma nacionalista burgués, que todos apoyamos al genocida Cristóbal Colón y su llamado “Descubrimiento de las Américas”. Al igual que no apoyamos el exterminio indígena que cometió, el saqueo permanente de las riquezas americanas con la colonización y el robo que aún hacen las multinacionales españoles, que por cierto, no olviden son propiedad de unos pocos oligarcas de aquí y que jamás representarán al conjunto del pueblo español.

Así mismo, en la medida en que el pueblo español me esté leyendo, le exhorto a que se prepare ante la campaña reaccionaria que se nos avecina en contra de la Revolución Socialista Bolivariana. Defiendan este proceso mientras merezca ser defendido (actualmente lo merece y mucho), defiéndalo por el futuro del Planeta, por la posibilidad de construir un mundo mejor, diferente, alejado de los patrones criminales desarrollistas del Capitalismo Global. Abran bien los ojos y no se dejen confundir, busquen diferentes enfoques a favor y en contra y ¡por favor!, no crean en absoluto a los medios del Capital. Contrasten la información desde diversos medios, saquen sus propias conclusiones y a ser posible ( más si son socialistas) háganse más de un amigo venezolano que además de relatarles cosas que jamás leerán en ningún sitio, les brindarán una maravillosa amistad. Avancemos en el internacionalismo proletario y en la hermandad de este gran pueblo compartido que es la humanidad.

(*) Jon Juanma es el seudónimo artístico/revolucionario de Jon E. Illescas Martínez, licenciado en Bellas Artes, artista plástico, analista político y teórico del arte socialista.

Anónimo dijo...

Como siempre, un tema de actualidad tratado con mucha seriedad y sin sesgos. Rafael mchas gracias.
Ramiro

Anónimo dijo...

Es una buena reflexión y aunque soy REPUBLICANA y en mi país vaya suceden situaciones politicas que me hacen dudar sobre la LEGITIMITAD DE LA DEMOCRACIA Y LA REPUBLICA, ya que la instalación de una FLIA REAL SE VE VENIR, debo decir que hubiera preferido el silencio del REY y el grito de los demás porque, a decir verdad, este BUEN SEÑOR VENEZOLANO emulo de NAPOLEON o de FIDEL, O DE VAYA SABE QUÉ PERSONAJE está abuerriendo un poco con su LATA irreverente, sobre todo para los que vivimos sus trpelías pagadas con dineros que gana de sus negocios con los enemigos que dice tener... No hay que ser ingenuos: er ARCHIDUQUE DE AUSTRIA está al morir, porque las guerras como cualquiera son NEGOCIOS DE POCOS y DOLOR DE MUCHOS y claro está NO LAS VAMOS A EVITAR CON UNA EXPRESIÓN DE DESEOS...
Creo que seguir escribiendo tus EDITORIALES u otros tantos que corren por la red, reflexionar sobre LOS POR QUE o las causas que producen hechos deslesnables e incomprensibles, tal vez nos lleven a huanizar este sistema unico que ha quedado en el planeta EL CAPITALISMO...
O es que hay algún otro???
Ya debemos de dejar de ser niños inocentes, las peles públicas traen NEGOCIOS Quien gane más es que el triunfa en esta batalla, lo que debemos cuidar es para qué esos triunfos con una LATINOAMERICA que carece de todo, pero tiene jóvenes y una EUROPA que muere de vieja porque no ha y jóvenes y todavía tiene REYES Mi DIOS... Qué INSTITUCIONES POCO REPUBLICANAS y desactualizadas...

A seguir trabajando por una AMERICA FUERTE Y LIBRE DE ESPIRITU PRIMERO, y CON BRIOS ORGULLO, DIGNIDAD y PICARDIA...
Si se calla el cantor, calla la vida!!! Cantemos y a trabajar por quienes lo necesitan...

Anónimo dijo...

Bueno, Silvio, Pablo, Drexler, Rubén Blades, Horacio Guaraní, Gilberto Gil ( ministro de cultura del brasil además de ser uno de los mejores jazzistas contemporáneos) son cantores. Estos tipos de la " cumbre " son otra cosa, incluso si están siendo acallados por otro ( no todo acallado será cantor entonces ). Eso suele suceder en las cumbres ( borrascosas, pues, jajaj; o ¿ borra cosas ? jajajajajaaj: muchas cosas quedarán en el tintero, no ? Inadvertidas.....). las cumbres son como el derecho: si esta disciplina aparece para salvaguardar los " derechos " justo allí donde más cerca están de su iincumplimiento, y por eso se necesita el derecho, pues si todos viviéramos en paz no necesitaríamos del derecho; si esto es así por allá ( por lo que yo llamaría el lar siniestro del derecho ), la cumbre viene siendo el lugar --el contexto, en suma-- en donde, ni más faltaba, no van a ser solucionados los problemas en curso, por lo menos no todos, y nunca de buen grado diplomático....Hay cumbres porque ciertos derechos diplomáticos, nuevamente, se incumplen. Y siempre se incumplirán... ¿ para qué cumbres si todo estuviera bien ? Es chistoso, mi madre ( bogotana ) ha tenido siempre una expresión para denotar algo gracioso, chistoso, o ridículo, o todo junto, , es a la única persona a la que le he escuchado la expresión; la expresión es ¡ Qué cumbre ! como quién dice: que chistoso........El lenguaje hispanoamericano es hermoso, y el lenguaje de las " cumbres " es muy ridículo........

Sobre chávez ( frías ) tengo dos cosas ( calientes ). la primera es un chiste flojo, y la segunda una consideración de índole política, cargada debidamente de vidriesito molido . va el chiste ( malo ): " Oye, apaga esas chávez que las aguas están saliendo frías "/ la consideración política es todavía más elemental: uribe velez ha puesto al presidente venezolano a hablar junto a estos animales de mal monte--se entiende que la guerrila, no los " cumbristas ", jejejej- por ser chávez ( frías ) un especímen muy parecido a ellos ( el subtexto o texto implícito es: " mira, loco de mierda, vos que sos casi un delincuente amparado en bolívar, vos, que sos un parroquiano tan del carajo, vete y te hablas sobre esta cosa imposible---el más vergonzoso intercambio dizque humanitario con locos antihumanistas y antihumanitarios--- con estos delincuentes; espero que se sientan entre amigos " ). no en vano, y nótese esto, y adviértase acá el enorme grado de ridiculez latinoamericana, el tipo más parecido a un guerrillero de entre los gobernantes latinoamericanmos--después de fidel castro, que ha enfermado de psicosis, por ser psicótico él mismo, a media humanidad cubana desde los años 60s-- es precisamente chávez ( frías ). Lo interesante del asunto es que chávez ( frías ) no se pille la indirecta......Pero como yo le decía, Rafael, hace algunas columnas: o se es filósofo o se es presidente........../ o se es un tipo refinado de espíritu, que se las pilla todas, o se es uno de esos que se " hace cargo del DESTINO DE UN PUEBLO".... ¡cómo suenan de feo esas palabras, no ? !jajajajajajaj.

saludo y muy buena, y equilibrada su columna...si, si, podría decir que es equilibrada......pero: chávez no es, ni mucho menos, un cantor. cantor es rubén o gilberto....jajaja.


R, cantor

Anónimo dijo...

¡Caramba, con ustedes! Este artículo de El Yesquero y de un tal Rafael
Rincón es patético. ¿Como se puede ser tan parcial?¿Ignorancia? Tal vez. Y
dale que te dale con lo de colonia y ex-colonias (jurídicamente, eran
provincias o capitanías). También, llamar a José María Aznar golpista es una
aberración. ¡Que pena que no tenga tiempo ni humor para contestar a este
señor! Bueno, sólo por el placer de decir algo con cierto humor, me referiré
a la parte del artículo en que el tal Rincón descubre aristas dictatoriales
en nuestra monarquía, porque "se acalla" (no dice "se multa") a un
caricaturista con 3.000 euros por dibujar al príncipe de España "haciendo el
amor" con su esposa Leticia. Bueno, no discuto que para el Sr. Rincón pueda
ser una sublime forma de hacer el amor; allá cada uno con sus gustos y
perversiones. Pero lo que, realmente, dibujó el caricaturista fue al
príncipe dándolo por el culo a Leticia. Y nuestro muy democrático Código
Penal, en su artículo 208, define el delito de injuria como la acción o
expresión que lesiona la dignidad de otra persona, menoscabando su fama o
atentando contra su propia estima y, cuando se hace la injuria con
publicidad, se castiga con pena de multa de seis a catorce meses. Sin
olvidar que se tipifican, también, delitos contra la Corona, y
concretamente, la injuria y calumnia contra el Príncipe heredero de la
Corona, penadas, también, con multa. Sin olvidar que las Constituciones
modernas que han tomado como forma de gobierno las monarquías, son tan
democráticas como las presidenciales. Bueno. Saludos. JULIO.



Abog. Julio Gil Pérez
Calle O´Daly, 21(B). 5º B
38700 Santa Cruz de La Palma.
España.
abogadogil@terra.es

Anónimo dijo...

Gracias por tu excelente YESQUERO ...Y ...NO TE CAYES..!

Anónimo dijo...

gracias Rafael .......que tal que callaramos? lo digo por ti
jorge

Anónimo dijo...

Les agradezco los envíos interesantes de la columna. Me parece balance reposados y reflexivo que mucho ayudan. Pregunto: ¿Por qué no los envían directamente, es decir, sin tener que acudir al clip? Un abrazo. Pedro

Anónimo dijo...

Son muchos los que quieren callar a Chávez. Las ventajas de Chávez son, una, tiene petróleo, y dos, no tiene oposición.

Preguntón

Anónimo dijo...

Un saludo de Paz y Bien , para todo el equipo del YESQUERO. Amigo Rafel Rincon.
Recibo con agrado tus cortas pero reflexivas paginas, que de todos modos hacen cierta ilustracion de la Coyuntura "Tras Bambalinas", demonio del que no podemos escapar, pero que bueno que existan ojos para ver y YESQUEROS, para decirlo..El reto del amigo alonso es grande y esperamos que con nuestra oracion y ayuda lo alcance. Por una Medell'in mejor.
Desde mi oficina en Roma te envio Rafita, un cvarignoso saludo y nos estamos comunicando.

Paz y Bien .

F. FRANCISCO LEUDO M.
Secretario Mundial de Justicia, Paz , salvaguarda de La creacion y ecumenismo. O:F:M: Conv.

Anónimo dijo...

18 de Noviembre de 2007 - LA HUMANA SALIDA DE CASILLAS
El rey y el camorrista

Por
Salud Hernández-Mora

Sería estupendo que para el 2010, año en que muchas naciones latinoamericanas celebrarán sus dos siglos de independencia, se lograra erradicar el síndrome victimista que atenaza a mucho dirigente populista y a vasallo que se deja embobar por ellos. Ya va siendo hora de pensar que si esta región del planeta padece un atraso social endémico y unos gobiernos desastrosos en muchos casos, no es porque los conquistadores españoles fuesen unos salvajes, arrasaran con el oro y aniquilaran buena parte de la población indígena, sino por otras razones posteriores. Entre ellas, esa enfermedad de paternalismo crónico que sufren millones de ciudadanos que esperan que el caudillo de turno les venga a solucionar todos sus males como por arte de magia.

El famoso porquénotecallas del Rey fue, a mi juicio, imprudente (aunque me fascinó), pero en nada salido de una mentalidad imperialista y nostálgica de viejas épocas. Don Juan Carlos es un enamorado de Hispanoamérica, término que ya no se puede utilizar como tantos otros para no ofender a los acomplejados, y si Chávez le sacó de quicio es porque "la verborrea camorrista de un sátrapa crecido", las "coces de un patán", "el demagogo lenguaraz", "el déspota indeseable", "el personaje burdo, prepotente e ignorante", según algunas de las definiciones que leí en los diarios españoles, descompone al más tranquilo y sereno de los mortales. Pero en absoluto porque el monarca se sintiera invadido por un espíritu superior, despreciativo hacia el mestizo.

Pienso que el Rey se tenía que haber mordido la lengua y esperar a que el presidente Zapatero contestara con dureza, pero dentro de los cánones que marca la diplomacia, a los permanentes y desproporcionados ataques que ese señor, tan bien descrito en el párrafo anterior por mis colegas, lanza cuando le viene en gana y sin motivo. Porque lo que hace y dice Chávez no tiene nada que ver con la defensa de la dignidad indígena y sí con su mentalidad caprichosa y despótica, así como con un interés electoral porque sabe que vender victimismo ancestral es muy rentable en las urnas.

Lo siento por Venezuela, más que por los empresarios y ciudadanos españoles que trabajan y residen en suelo bolivariano. Tener a ese patán de jefe supremo es una tragedia que atrasará a la nación hermana más de dos decenios. Y peor a partir del 2 de diciembre, cuando convierta la República en su reino de miserias, mal disimulado por los mares de petróleo con los que chantajea a los enemigos que cada día se inventa.

Ningún país debe soportar los insultos de un mandatario extranjero, por muy rico y famoso que sea, y por mucho que le cueste la defensa. Bajarse los pantalones no paga, como lo han demostrado los gringos con Colombia y su ansiado TLC. Pero hay que responder bien. Y la salida "humana" del Rey, que en España se ha aplaudido con pasión o, cuanto menos, comprendido, desde casi todos los rincones, no fue la más adecuada. Y no lo fue, no tanto porque ahora el payaso amenace con revisar las relaciones con las compañías españolas, sino porque, insisto, contestar en un tono coloquial, callejero, al lenguaje grosero del camorrista no es la forma adecuada de hacerlo. A fin de cuentas, el "sátrapa crecido" es el Jefe de Estado de una nación y si cada cual empleara los términos de los caudillos en los discursos y debates, las Cumbres y demás reuniones de supuestos amigos acabarían como una pelea de verduleras y con más de una relación rota.

Lo mejor del incidente, de todas formas, además de beneficiar al Rey, que necesitaba ese respaldo multitudinario de sus compatriotas, ha sido volver a poner sobre la mesa el peligro inminente del chavismo, ahora nuclear. Qué susto.

Anónimo dijo...

Por: HERNANDO GARCÍA MEJÍA
“¿Por qué no te callas?”


PRIMER TINTO

POR sus constantes berrinches, Uribe, recién graduado de “Inteligencia superior” por el primo de Pablo Escobar, merece también un poco de la medicina que el rey Juan Carlos acaba de prescribirle a Chávez. Tan hablador y conflictivo como el líder bolivariano, el paisa pelea hasta con su sombra.

Un día sindica a la Corte Suprema de Justicia de procederes tortuosos; otro insulta a Gonzalo Guillén, acomodándole la coautoría del libro de la Vallejo; otro día trata de miserable a Daniel Coronell, a quien ya había desterrado su queridísimo amigo Náder, tan “simpático y buena gente”; otro día ridiculiza a Pachito Santos, dando a entender que le “lagarteó” la vicepresidencia; otro día vuelve a enfilar baterías contra Carlos Gaviria, cuya sombra parece estorbarle; otro día se inventa la mala fábula de la hecatombe, que bien pudiera ser otro de los aparatosos falsos positivos de Juan Manuel, el prócer de la bandera al fondo…

Cada día una salida en falso, que so pretexto de autodefensa -el término encaja como anillo al dedo- echa por tierra la dignidad presidencial y, de paso, la respetabilidad del Estado. Lo que, por supuesto, deja indiferentes a los ingenuos que siguen pensando que como él es la Patria y la Patria es él, puede hacer lo que le plazca. “Así nos gusta Uribe presidente”, proclamó uno de sus incondicionales en estas páginas, cuyo pluralismo insobornable se debe, paradójicamente, a otro Uribe.

También al Presidente se le ha sugerido que se calle por el bien del país, pues su incontinencia verbal polariza con el mal ejemplo y pone en peligro a las víctimas de sus rabietas. No se corrige pero la realidad lo castiga de continuo y las cosas se le enredan más de la cuenta. ¿Cómo? Veámoslo:
Ganan los demócratas y se hunde su aliado Bush; los demócratas le frenan el TLC y empiezan a exigirle lo que debió haber hecho motu proprio desde el principio; Al Gore, ahora Premio Nobel de la Paz, le hace el desplante de negarse a reunirse con él; el The New York Times pide bloquear el TLC; ganan el Premio Simón Bolívar de Periodismo dos de sus más inteligentes y corajudos contradictores: Daniel Coronell y Juan Gabriel Uribe; Gustavo Petro es premiado en E.U. por su trabajo en defensa de los Derechos Humanos; Peñalosa, su candidato, pierde estruendosamente la alcaldía de Bogotá; Barack Obama y Hillary Clinton anuncian que no están de acuerdo con el TLC y la última afirma que si llega a la Presidencia acabará con los tratados.

¿El Cristo de espaldas? ¿A callar tocan?

Aviso

Motivo hecatombe para segunda reelección presidencial se buscan brujos y taumaturgos con el fin de causar nuevamente el deshielo del Nevado del Ruiz. Comunicarse en Bogotá o Manizales con Luis Guillermo Giraldo, encargado del asunto.

Anónimo dijo...

estimado amigo, le envio saludos, y un trabajo mio sobre este valioso cantautor

CARLOS VIVES, UN FOLCLORISTA SIN COMPLEJOS




A este cantautor, descendiente de una buena gardeliana, se le conoce en cualquier parte; sus producciones se escuchan de un lado a otro del globo. Y asegura, de forma reiterada en entrevistas, que aunque carga muy bien de rockero, su sueño siempre ha sido el de conseguir un sonido para la provincia. Es por ello, que ni corto ni perezoso, se le ha visto remontando una música que viene de abajo, y con mucha fuerza. Tanto, que se puede afirmar que su trabajo es una línea que proviene del vallenato costumbrista, a la que le suman sus letras que resultan bastante contagiosas para sus fanáticos.


Carlos Vives es, unido al resto de la trilogía compuesta por Shakira y Juánes, el mejor producto de exportación de su país, Colombia. Una nación que gano fama no solo por su buen café, sino también por una propuesta musical, que en buena parte de la región estadounidense, ha servido para comprender la creatividad de estos compositores colombianos, ayudados también por la mala racha del genero salsero, tan invadido por pésimos letritas y arreglistas acostumbrados a ese trafico de sun sun con el que despachan las exigencias de un publico cada vez mas informado.


Su tío, Rodrigo Vives Echeverría, profesional de la medicina, realizo su estancia rural en Villanueva, lugar donde se origino la genealogía emblemática del vallenato, con quienes estableció fuertes lazos de amistad. Asi, que a temprana edad, este mozo Carlos, pudo captar la esencia del modelo primario de este genero, al que luego de unos años, ya en su adolescencia, sumo la experiencia de ver a Binomio de Oro, Jorge Oñate y Alfredo Gutiérrez. Con su despierto interés por esa música, y su amplia gama de recursos como compositor, dio origen a nuevos sonidos, acelerando así un buen parto de ese ritmo con el que ahora le da la vuelta al mundo.


Hay que aplaudir a este artista, ya que cada vez que declara, no sin asomar su carácter autocrático, deja bien puesto el escenario para la interpretación del fenómeno de la música en su país. No se considera folclorista,(y es el mas lucido de todos) ya que como lo ha dicho en reiteradas ocasiones, “en la industria no hay folclor .El folclor no se graba, no se ilumina con luces”. Y es que una de las virtudes mas grandes del vallenato se encuentra en sus letras, que nos hablan de historias llevadas a la verdadera gloria, ya que reflejan su facilidad para transmitirla a las comunas que han crecido con el. Se trata de un literatura oral, que nace de reuniones y parrandas, y que se armoniza, ya sea con un acordeón o carrizo.



Asi que ideas en mano, no se puso a pensar en las limitaciones que siempre pone la industria, y se comprometió con uno de los proyectos mas ambiciosos para sus tiempos, ya que muy pocas veces el mercado retribuye o premia el verdadero esfuerzo. El tema, Como Tu, por citar un ejemplo, es una muestra de esa sensibilidad costeña, armado a partir de una idea muy sencilla, que va convirtiéndose, a lo largo de su interpretación, y pese a ser una composición de letra reducida, que se repite y resalta en coro, debido a la armonización del acordeón, la guitarra eléctrica y sus otros instrumentos, termina consiguiendo lo que se esperaba, es la de recalcar ese Como tu, que en su versión de video se ve adobada por la gracia y el baile de tres geniales y bellas costeñitas de película.


Carlos Vives es mas que un nombre en la industria de la música; su aporte cada vez mayor a la comprensión de la cultura musical colombiana ( en especial, la de provincia) no tiene parangón. Y es justo decir, que sumado a su creciente interés por el folclor de su país y el de los vecinos, ya el mismo es un icono dentro de mercados que parecían insospechados, como la zonas mas ortodoxas de algunos estados norteamericanos, donde ahora cualquiera tararea su música y sus letras, y se queda con las ganas de meterse en una parranda muy a la colombiana, y pedirse un tirón, un ron y una de esas costeñitas del video para curarse hasta el reumatismo.



Manuel Bolívar Graterol