el yesQuero, Nro. 154
Colombia, la res nostra
Por
Rafael Rincón*
Si el filósofo griego Aristóteles (384-322 a. de C.) viviera hoy en Colombia, su célebre frase en donde define al hombre como un zoon politikon (animal político) hubiera terminado acuñada como zoon parapolitikon (animal parapolítico).
Según el estagirita el animal político se ocupaba de la polis, de la ciudad, del Estado, de su funcionamiento, de su organización y estructura. Lo propio de él era lo público que era también la vida social. Lo político era la ciudad, el Estado, lo social.
Colombia es un país sin política. Un país sin Congreso, sin lo público y con la ciudadanía amenazada. Un Estado inferior, algo menos que Estado.
En las democracias el lugar por excelencia de la política es el Congreso de la República; pero, el Congreso colombiano fue convertido en el hábitat, la madriguera, de los señores de la guerra. Primero, fue la visita al Congreso del comandante paramilitar Salvatore Mancuso y su séquito vociferante; ellos se sentaron, intimidaron y ordenaron. Fue la “palomita” parlamentaria, el país creyó que eran extraños, pero realmente estaban visitando a sus pares.
Luego, se cayó el tinglado cuando la Corte Suprema de Justicia sindicó una veintena de congresistas de secuestro y concierto para delinquir, quedaron al descubierto los congresistas prepago del paramilitarismo y del narcotráfico. Quedaron en evidencia las jurisdicciones electorales de la parapolítica. El partido presidencial de la U quedó al descubierto con sus tenebrosas alianzas
Si la política es debate y deliberación, en Colombia no hay política porque las leyes se hacen en desayunos presidenciales, se aprueban “micos” a pupitrazo limpio y se obedece cerrilmente las directivas del “líder” del ejecutivo.
La política desaparece cuando la deliberación es remplazada por la imposición. En el Congreso los derechos de las personas desaparecen en oscuras conciliaciones, pactos del más allá, mandatos de la obra de Dios, como ocurrió con los derechos de las parejas homosexuales.
No hay política en Colombia porque la cosa pública, la res pública, la República, no la asumen ni el Presidente ni el Congreso. Ellos son Presidente y Congreso de la cosa nostra, de la res de los hacendados, son los guardas de la res privada.
El cuestionado ganadero del Magdalena Medio Carlos Arturo Clavijo Vargas, líder del movimiento “No al despeje”, llegó al Congreso en el año 2002, con su fórmula a Cámara de Representantes Rocío Arias, para cuidar sus reses, su hato ganadero y el de sus compinches. Él no llegó a deliberar, llegó a imponer un proyecto político para refundar un nuevo país que había pactado con su candidato a la presidencia en el municipio de Puerto Berrío (Departamento de Antioquia), el ex gobernador de Antioquia Álvaro Uribe Vélez.
El animal parapolítico es la negación de la política. Se ocupa, desde el mundo privado, de lo público, niega al Estado, pero lo convierte en un trampolín para los negocios privados.
La parapolítica es, parodiando al teórico político alemán Carl Schmitt, la guerra por otros medios. Los paramilitares cuando tomaron la decisión de institucionalizar su proyecto “político” triunfante, consagrado en la Constitución de Paramillo (2001), que consiste en refundar al país, lo que hicieron fue decidir continuar la guerra por otros medios.
Esa guerra que produce mejores resultados que la paz, que es más económica que la paz es el estado político deseado, es un estado parapolítico, llamado por ellos Estado comunitario, porque pone en común las instituciones del Estado democrático con los intereses de la sociedad autoritaria.
La parapolítica, esa que enarbola la seguridad democrática y muestra como botín la disminución de homicidios, es ni más ni menos, una propuesta de “guerra fría” a la colombiana.
Ese es el famoso post conflicto en donde nace la Comisión Nacional de Reconciliación y la Ley 975 de 2005, son las legislaciones para acomodar las secuelas del nuevo orden.
Lo más público para este zoon parapolitikon colombiano es el Tratado de Libre Comercio (TLC), porque es lo más común de los intereses particulares dominantes. Es un tratado que el parapolitikon define como la síntesis de todas las oportunidades de negocios.
El zoon parapolitikon no se interesa por los dracmas, ni por los dramas, su interés son los dólares y las comedias. El dolor de las víctimas del desplazamiento forzado se celebra con papayeras, confetis y algarabías en donde las bases sociales extorsionadas alaban y rinden culto a los crímenes de lesa humanidad de sus amos.
El animal parapolítico es un ciudadano sin Estado. Aprendió la autodefensa y convirtió la estrategia antisubversiva en proyecto de Estado. El animal parapolítico responsabiliza al Estado de la falta de seguridad, afirma que no hay Estado que lo defienda. Es un parapolitikon que no tiene obligaciones, no paga impuestos, pero quiere tener privilegios, quiere tener un Estado que le cuide las tierras, que proteja la res nostra.
El zoon parapolitikon tiene ejércitos particulares, tolerados muchas veces por los ejércitos oficiales, para garantizar su statu quo, que es un estatus social que denigra del estatus político.
La parapolítica es el dominio del miedo, el triunfo de un orden conservador, de una economía ilegal, la negación de las libertades. Es el autoritarismo sin Estado, es la arbitrariedad de civil, una dictadura sin charreteras.
* Director del Consultorio de Derechos y Gobernabilidad háBeas Corpus.
Medellín, 27 de junio de 2007
Según el estagirita el animal político se ocupaba de la polis, de la ciudad, del Estado, de su funcionamiento, de su organización y estructura. Lo propio de él era lo público que era también la vida social. Lo político era la ciudad, el Estado, lo social.
Colombia es un país sin política. Un país sin Congreso, sin lo público y con la ciudadanía amenazada. Un Estado inferior, algo menos que Estado.
En las democracias el lugar por excelencia de la política es el Congreso de la República; pero, el Congreso colombiano fue convertido en el hábitat, la madriguera, de los señores de la guerra. Primero, fue la visita al Congreso del comandante paramilitar Salvatore Mancuso y su séquito vociferante; ellos se sentaron, intimidaron y ordenaron. Fue la “palomita” parlamentaria, el país creyó que eran extraños, pero realmente estaban visitando a sus pares.
Luego, se cayó el tinglado cuando la Corte Suprema de Justicia sindicó una veintena de congresistas de secuestro y concierto para delinquir, quedaron al descubierto los congresistas prepago del paramilitarismo y del narcotráfico. Quedaron en evidencia las jurisdicciones electorales de la parapolítica. El partido presidencial de la U quedó al descubierto con sus tenebrosas alianzas
Si la política es debate y deliberación, en Colombia no hay política porque las leyes se hacen en desayunos presidenciales, se aprueban “micos” a pupitrazo limpio y se obedece cerrilmente las directivas del “líder” del ejecutivo.
La política desaparece cuando la deliberación es remplazada por la imposición. En el Congreso los derechos de las personas desaparecen en oscuras conciliaciones, pactos del más allá, mandatos de la obra de Dios, como ocurrió con los derechos de las parejas homosexuales.
No hay política en Colombia porque la cosa pública, la res pública, la República, no la asumen ni el Presidente ni el Congreso. Ellos son Presidente y Congreso de la cosa nostra, de la res de los hacendados, son los guardas de la res privada.
El cuestionado ganadero del Magdalena Medio Carlos Arturo Clavijo Vargas, líder del movimiento “No al despeje”, llegó al Congreso en el año 2002, con su fórmula a Cámara de Representantes Rocío Arias, para cuidar sus reses, su hato ganadero y el de sus compinches. Él no llegó a deliberar, llegó a imponer un proyecto político para refundar un nuevo país que había pactado con su candidato a la presidencia en el municipio de Puerto Berrío (Departamento de Antioquia), el ex gobernador de Antioquia Álvaro Uribe Vélez.
El animal parapolítico es la negación de la política. Se ocupa, desde el mundo privado, de lo público, niega al Estado, pero lo convierte en un trampolín para los negocios privados.
La parapolítica es, parodiando al teórico político alemán Carl Schmitt, la guerra por otros medios. Los paramilitares cuando tomaron la decisión de institucionalizar su proyecto “político” triunfante, consagrado en la Constitución de Paramillo (2001), que consiste en refundar al país, lo que hicieron fue decidir continuar la guerra por otros medios.
Esa guerra que produce mejores resultados que la paz, que es más económica que la paz es el estado político deseado, es un estado parapolítico, llamado por ellos Estado comunitario, porque pone en común las instituciones del Estado democrático con los intereses de la sociedad autoritaria.
La parapolítica, esa que enarbola la seguridad democrática y muestra como botín la disminución de homicidios, es ni más ni menos, una propuesta de “guerra fría” a la colombiana.
Ese es el famoso post conflicto en donde nace la Comisión Nacional de Reconciliación y la Ley 975 de 2005, son las legislaciones para acomodar las secuelas del nuevo orden.
Lo más público para este zoon parapolitikon colombiano es el Tratado de Libre Comercio (TLC), porque es lo más común de los intereses particulares dominantes. Es un tratado que el parapolitikon define como la síntesis de todas las oportunidades de negocios.
El zoon parapolitikon no se interesa por los dracmas, ni por los dramas, su interés son los dólares y las comedias. El dolor de las víctimas del desplazamiento forzado se celebra con papayeras, confetis y algarabías en donde las bases sociales extorsionadas alaban y rinden culto a los crímenes de lesa humanidad de sus amos.
El animal parapolítico es un ciudadano sin Estado. Aprendió la autodefensa y convirtió la estrategia antisubversiva en proyecto de Estado. El animal parapolítico responsabiliza al Estado de la falta de seguridad, afirma que no hay Estado que lo defienda. Es un parapolitikon que no tiene obligaciones, no paga impuestos, pero quiere tener privilegios, quiere tener un Estado que le cuide las tierras, que proteja la res nostra.
El zoon parapolitikon tiene ejércitos particulares, tolerados muchas veces por los ejércitos oficiales, para garantizar su statu quo, que es un estatus social que denigra del estatus político.
La parapolítica es el dominio del miedo, el triunfo de un orden conservador, de una economía ilegal, la negación de las libertades. Es el autoritarismo sin Estado, es la arbitrariedad de civil, una dictadura sin charreteras.
* Director del Consultorio de Derechos y Gobernabilidad háBeas Corpus.
Medellín, 27 de junio de 2007
18 comentarios:
La mejor descripción que he encontrado de la cosa colombiana, la cosa nostra, que es más de ellos que nostra.
Jorge
Excelente y mejorando. Ahí está. Eso es lo que ha pasado y está pasando Dr. Rafael. Valiente columna.
Luisa
LA COSA ES QUE SI NO ES NOSTRA LA COSA HUBIERA QUEDADO PARA LA GUERRILLA.
ES MEJOR NOSTRA QUE DE USTEDES.
LA RES DE JOJOY, DE MARULANDA Y DEMAS TERRORISTAS ESTABA EN EL CAGUAN, AHORA ES LA RES DEL UBERRIMO. LA RES DE ITAGUI, DE RALITO
Este país está parapolitikiado, quien lo desparapolitiquice, un buen desparapolitiquizador será.
Silvia Silva
Hola, señor Rincón, cordial saludo. Leo con atención todas las columnas suyas que llegan a mi correo electrónico y debo decirle que me parecen de un valor y una sensatez admirable. Lo felicito de verdad. Este país está urgido de un periodismo que responda con altura a los grandes desafíos que enfrentamos.
Mi nombre es Laura Ardila Arrieta, soy periodista de Cartagena y tengo 24 años. Actualmente trabajo en la revista Semana Jr, de Publicaciones Semana y colaboro en la edición de otra publicación, bastante pequeña, que circula en la Costa y se llama 'El Metro'. Quiero preguntarle si hay alguna posibilidad de difundirr en ésta última su columna, por supuesto, con el nombre del autor y de su organización.
Quedo agradecida con su respuesta.
Saludos,
Laura.
EXCELENTE
JORGE
hey ya no quiero que me manden tanto correo pendejo que no dise nada no me vuelvan a mandar mas maricadas de esas
El remedio llamado SEGURIDAD DEMOCRÁTICA ha servido para que la enfermedad social de este País se enmascare como dicen los médicos. No se nota que los síntomas y el mal esten cercanos a la cura.¿ Hay que cambiar de médico y de medicina.?
Édgar
Muy bueno, me gusto mucho
Felicitaciones por este texto. Es uno de los mejores y mas lucidos que he leido sobre la realidad colombiana. Eduardo
hombre, muy ingeniooso el recurso aristototélico; impecable, diría yo: PERO cuidado: ARISTÓTELES TENÍA ESCLAVITOS, Y SEGURAMENTE AMABA A ALGUNO DE ELLOS. a mi grecia me da asco, exceptuando a luciano. le recomiendo que lea a luciano de samosata, precursor del humor moderno... etc. el humor moderno también es clásico.
ahora, no estoy seguro de que paz sea tener a un `país cuya insurgencia quiere la mitad del territorio, y que paz sea permitir esa lOcura sin darles plomo, o sin tratarlos como delincuentes, como psicóticos de orden internacional y terrorístico ( ¿ USTED CREE QUE UN POLÍTICO SENSATO DE CUALQUIER PARTE DEL MUNDO QUIERE UN SECTOR DE UN PAÍS PARA ELLOS SOLOS ? NO SEAMOS TAN RELOCOS...ESO PRUEBA QUE NUESTRO TERRORISTOMES EXQUISITAMENTE DEMENTE....... ). ¡ cómo se avendrían DE BIEN Y CÓMO LUCEN POR SU AUSENCIA los jucios profesionales de luis carlos restrepo, el doctor ternura ! esa ternura de un país cohibido por delincuentes que quieren hacer la dictadura de la izquierda CON METRALLA CRIMINAL Y NO CON ACADEMIA E INVESTIGACIÓN SOCIOPOLÍTICA no es un país asomado a la paz. PAZ ES ACABAR CON EL MALO, HOMBRE, NO QUE EL MALO GOBIERNE SIN NINGUNA LÓGICA ÉTICA O HUMANA.....Y ME REFIERO ES AL GOBIERNO SECRETO DE LOS TERRORISTAS, NO EL DE ESTE MEDIOCRE QUE NO HA SABIDO ACLARAR CÓMO ERAN ( ERAN ERAN ERAN ) VIRTUOSAS LAS AUTODEFENSAS Y CÓMO ES UNA LOCURA, EN CAMBIO, LO QUE PASA AHORITA........
Y OTRA COSA: SI EL ESTADO NO ME AYUDA, PUES YO ME AYUDARÉ SOLITO........JAJAJA ¡¿ SERÉ PARAMILITAR POR ESO ? NO CREO: SOLO SOY UN SER HUMANO SENSATO, TAN ALEJADO DEL AUTORITARISMO BARATO DE URIBE ( QUE ES UN MEDIIOCRE DE TALLA INTERNACIONAL ) COMO DE LA MENDACIDAD DE LOS DELINCUENTES COMUNES Y TERRORISTAS, TERRORISTAS DE BANDO Y BANDO. SI EL ESTADO O LA POLICÍA NO ME AYUDA, PUES HAGO DE CUENTA QUE NO EXISTEN Y PUNTO, HERMANO, Y EN CAMBIO ME DEDICO A SER EL MEJOR MÚSICO DE LA CIUDAD, POR EJEMOPLO, Y A GANAR MUCHO DINERO, TANTO QUE PUEDA DECIR CON TRANQUILIDAD DE MOVIMIENTO Y POSIBILIDADES COSAS COMO: NO SOY COLOMBIANO; SOY HISPANOAMERICANO... PUNTO. HASTA QUE MATEN A GARAVITO, NO VUELVO A SER COLOMBIANO. JAJAJAJAJAJAJAJJAJ. BUENO, SOY DEL PAÍS DE CARLOS VIVES, EL CUERPO DE CHAQUIRA, DE GARCÍA MÁRQUEZ--- QUE ALGUNOS IMBÉCILES CONFIANZUDOS LE DICEN GABO, COMO SI SE HUBIERAN CRIADO CON ÉL--------, DE ANTONIO ARNEDO Y DE MI FAMI8LIA ARAÚJO ( JEJEJEJEJEJEJEJEJEJ ), Y LA MONTERO TAMBIÉN------------------LA HERMOSA FAMILIA DE MI DE MI MADRE-----. SOY DE ESA COLOMBIA QUE SABE QUE NO ES PAZ DEJARSE FREGAR POR EL TERRORISMO DESCARADO QUE ESTÁ AMPARADO POR LAS IRRESPONSABILIDADES JURÍDICAS Y RETÓRICAS DEL DIZQUE PENSAMIENTO DE CORTES Y DERECHOS HUMANOS INTERNACIONALES: PURA BASURA...........DE ESA COLOMBIA: LA QUE DICE: SI AMI UN ATRACADOR ME QUIERE MATAR EN LA CALLE A CAMBIO DE MI PLATA, PREFIERO YO MATRARLO A ÉL. ESO ES INSTINTO DE VIDA, EL RESTO ES PAJAzO MENTAL ENM EL SERVILISMO ÉTICO DEL FALSO DIÁLOGO.....ESE ATRACADOR ES EL TERRORISMO, VENGA DE DONDE VENGA, Y NO NECESITO SER POLITÓLOGO PARA LLEGAR A LA CONCLUSIÓN DE QUE LA JUSTICIA ES ACABAR CON EL MAL, NO DEJAR QUE EL MAL IMPERE COMO PEDRO POR SU CASA.......
ENTONCES: muy ingenioso el recurso aristotélico, pero, ay, cuidado que esos griegos homosexuales eran esclavistas, plutocráticos, CLASISTAS, aristócratas, guerreros, y creían ---antes, antes de la llegqda de la filosofía y el travesti de platón, del que se enamoró el mencionado aristo con espectacular distancia generacional y de cultos epistemológicos, y despues ya no, porque seguramente llegó otro marrano chiquito al gimnasio, que lo despisto delmaestro amado...---en un dios bisexual que se violaba si quería a l pobre ganímedes cuando quería, y a otr@s transformándose en lo que fuera, claro que no se si fueron los primeros que se inventaron la sabiduría sde la autodefensa, jejejejjejejejejejeejejejejj. me río porque creo, con lacan, que grecia era territorio de perversos, auqneu fueran sabios...serían menos asquerosos si se hubieran inventado las convivir: jejejejejejejejejejeejejejejejej. pero en un momento en que fueran imprescindibles, como acá...... hace 10/15n años. ( risas, risas, risas )
paramilitares atenienses ( todos homosexuales ) copntra paramilitares espartanos ( que eran más viriles pero maricas igual, jejejejej ). el recurso aristotélico, así, y desde esta sátira conceptual, debe implicar por supuesto poner en tela de juicio el mismísimo legado aristotélico desde el cual se impugna con ironía nuestro ethos ingobernable/nante: ¿ no es a laas claras sospechoso el esclavismo griego ? sabiendo eso queda más difícil utilizxar al mismo aristóteles ( que hoy sería un filosofo queer con sobre nombre de drag queen en algún puerco bar de amsterdam o de bogotá uqejumbrosa, bizarra y coqueta, jejejej, sería una especie de vattimo, O QUIEN SABE SERÍA TAL VEZ UN PROFESOR DE LÓGICA DE LA UNIVERSIDAD DE LOS ANDES CON UNA DESGRACIADA TENDENCIA HACIA LOS JOVENMCITOS DE 19 AÑOS....... ) como recurso de impugnación irónica. tener cuidado con grecia: DANGEROUS....JAJAJA. Y TENER CUIDADO CON COLOMBIA...........PREFIERO A ANTONIO ARNEDO, POPR ESO ESTOY TRANQUILO........
saludos de .... hispanoamericano: jejejejejejejejejeejejejejeje.
__________________________________________________
Apreciados amigos, permítame transcribirle unos párrafos de mi tesis de espeialista en derechos humanos ¿QUÉ GUERRA?, ¿CUÁL PAZ? UNA MIRADA AL CONFLICTO ARMADO COLOMBIANO, ESAP, Bogotá, Octubre de 2006, que creo entrega elementos para este debate nacional.
¿Qué guerra?
El país vive y sufre una guerra civil no declarada, caracterizada por la configuración de enemistades absolutas: desde de la insurgencia, las FARC y desde la contrainsurgencia, los grupos paramilitares y sectores radicales de las FF.AA. Adicionalmente, se configuran componentes marginales de enemistades relativizadas (ELN), en una estrategia de guerra de guerrillas en situación de precario margen de operatividad. Finalmente, se expresa una fuerte criminalización por parte del Estado, definitiva hacia las FARC, relativa hacia el paramilitarismo y aparentemente complaciente respecto a los sectores radicales de las FF.AA.
En este marco se pueden identificar algunos intereses que en esta guerra se juegan los actores. Por una parte, es evidente que el Estado, bajo la conducción del actual gobierno y sobre la base de la saturación de los esquemas de negociación sin compromisos previos y en medio de la guerra, se propone armonizar un esquema institucional de corte autoritario, denominado comunitario, en el cual la libertad y el orden queden definitivamente bajo la tutela preferencial del Estado, de tal manera que le permita, en un proceso de desregularización económica plena, garantizar los intereses corporativos del capital, minimizando al máximo las responsabilidades sociales de la propiedad privada y facilitando, en esta etapa, la entrada en escena de los grandes capitales privados y de las rentas que han dejado casi tres décadas de economía ilegal, especialmente el narcotráfico. La guerra controlada parcialmente le permitiría al actual gobierno impulsar las reformas institucionales más urgentes; pero requiere de la paz para consolidar el proyecto.
Por su parte, los paramilitares, bajo la modalidad de guerra de posiciones con control territorial, asociados fuertemente a las redes del narcotráfico y el contrabando, y vínculos estrechos con sectores de las FF.MM., requieren de la legalización de sus capitales clandestinos y sus bienes, especialmente territoriales, –algunos analistas hablan de 20 mil millones de dólares y casi un millón de hectáreas de tierra. Gráficamente, requieren pasar de la acumulación originaria a la reproducción ampliada de capitales, pero con garantías políticas e institucionales. Sus intereses se centran en los megaproyectos de la agroindustria, la ganadería y el gran comercio.
Requieren de la "paz" estatal, o sea un pacto que les garantice sus inversiones. El proyecto de reforma estatal impulsado por el actual gobierno le es consustancial a sus propósitos de "reincorporación a la vida civil".
Finalmente, la insurgencia en esta guerra se sitúa de manera diferencial. El ELN, en un estado de "marginalidad y repliegue combativo", decide voluntariamente y bajo un esquema de negociación directa con el gobierno de turno con participación de la sociedad civil, asumir una estrategia de paz consensual. Intenta recuperar en la negociación los umbrales de apoyo social y políticos que logró construir en la etapa de su mayor expansión y capacidad militar, pero que se fueron reduciendo a medida que los paramilitares se consolidaron territorialmente en los que fueran sus más fuertes centros rurales de operaciones. Es un ejercicio societal de paz en el que propende garantizarse un paso a la legalidad con redes ciudadanas de apoyo ya establecidas.
Por su parte, las FARC, bajo una estrategia de guerra popular prolongada, a la cual no renuncia desde la perspectiva de su lucha por el poder político, y un repliegue estratégico después de los grandes despliegues de su capacidad militar y operacional en zonas rurales que fueran de su total dominio, busca un reconocimiento político de su beligerancia, a partir de presionar un "intercambio humanitario" de presos por secuestrados, en las condiciones de una negociación directa y territorialmente acordada. En su estrategia revolucionaria la paz negociada no está prevista, se ubica en la mesa de negociaciones como enemigo absoluto del Estado y de las fuerzas que lo representan. Pero adicionalmente, consideran que la paz negociada, si se llegara a dar, es un asunto exclusivamente de los beligerantes. Sería un pacto de reconocimiento "entre pares" y de reconfiguración del esquema institucional y del modelo socioeconómico. Tiene los medios financieros –provenientes del secuestro, la extorsión y el
narcotráfico- y logístico-militares –adquiridos en el mercado negro- para sostenerse en pie de lucha en el tiempo, pues sabe que la "revolución no se puede ganar por contrato" y, que desde la política electoral, lo único que hasta el momento se le ha ofrecido por parte de los gobiernos, le es muy difícil, cuando no imposible, acceder al poder o al menos ganar electoralmente.
Las guerras, sus dinámicas y sus violencias son metaconflictos mucho más complejos que el desarrollo y desenlace de una escaramuza o una gran batalla; sus múltiples determinaciones territoriales, políticas, sociales y psicológicas, obligan a pensar creativamente y con mayor énfasis, la paz.
--
Guido Alberto Bonilla Pardo
Rafael gracias por tenerme presente con tus comentarios, hermano y esta masacre de los diputados del Valle en que lios nos han metido, en vuelo es necesario retanquear los aviones de guerra para acabar con estos terroristas..... palabras del señor presidente haces poco en el Valle de del Cauaca, entonces grupos no identificados atacaron y luego 11 crimenes...?
Cuidate hombre de bien.
Héctor
Rafa,
Ahí vamos conquistando los medios alternativos, no? Esa última estuvo fabulosa: un texto muy bien logrado.
Lo publicaré cuando algunos problemas técnicos se solucionen (estás de acuerdo?).
Muahas gracias por eso.
Hasta pronto,
Christian Lara
Muy de acuerdo Rafael. El Congreso de la Res-pública está constituido por matarifes y ganaderos para los cuales la vida de una vaca vale más que la de un ser humano.
Las cosas del Estado... pero me pregunto ahora: ¿será que sí vivimos en una "sociedad"? ¿será que eso del "contrato social" no se nos habrá convertido en "contrato sicarial"?
Por último, creo que no sólo con "papayeras" celebran los conquistadores de hoy (por fortuna esas agrupaciones menores no tienen NADA que ver con las Bandas de Porros). Me da la impresión que ahora han creado un Grammy para celebrar sus propias atrocidades.
Abrazos,
Buenas noches, doctor Rincón, he leido su columna, la cual ha llegado a mi correo, y con todas las verdades cantadas de nuestro país, considero que quienes hemos pasado por la universidad debemos ser más propositivos frente a los aspectos de la economia politica y la legitimación del estado, sobre todo cuando la división nacional es tan alta. Hay por medio intereses economicos, ya no creemos consideramos que el mundo se reconoce en buenos y malos, pues en Colombia lo que se discute y negocia son territorios de poder, ello es mercados y negocios, entre nacionales e internacionales y cada grupo tiene sus representantes locales, como en tiempos de la conquista y la colonia. en ello se sustenta esta guerra, la crueldad, el secuestro, el debilitamiento del capital nacional, el gencidio, la infamia y la mentira. La historia de la fara y la para politica, crea dolor, división riega pobreza en los colombianos y ganancias en los bandos. Por eso lo invito a hacer más proactivos frente a un pais que se desangra, se disminuye economicamente, y en el cual la politiqueria no alcaza a gestionar asuntos de producción, de mercado para el empleo, de una politica de ciencia y tecnologia, de salvaguardar el patrimonio cultural y ecologico, de cobertura educativa, de incersión en la economia mundial.
Respetuosamente
Cruzana Echeverri R.
Muchos paises emiten bonos de carbono para promover la baja emisión de gases y ganarle la carrera al CO2 y al calentamiento global. Aqui en nuestra ciudad ignoramos todo esto y mucho más.
Señores gobernantes ¿Quienes son sus asesores? Se formaron académicamente en el extranjero pero no conocen el contexto mundial, les cuento que no es necesario formarse en el extranjero para ser un experto en lo que sucede en el mundo.
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