el yesQuero
Columna de análisis y crítica política
www.elyesquero.blogspot.com, elyesquero@gmail.com
No. 122. Medellín, Colombia
Crecer con la deshonra ajena
Por
Rafael Rincón (*)
Rafael Rincón (*)
Los resultados inventados, los logros virtuales, los videos oficiales son otras formas de “falsos positivos” para inflar gestiones administrativas que compiten con los montajes del Ejército Nacional en Jamundí, departamento del Valle.
El Gobierno Nacional sacrifica Generales que no son de su cuerda cuando se presentan escándalos en la Fuerza Pública, pero guarda silencio, habla de infiltraciones y perdona a quienes comulgan con sus prácticas autoritarias.
El Ejército de Colombia tiene el monopolio legítimo de la fuerza, pero no tiene el monopolio de los falsos positivos. Por ejemplo, la Administración Municipal de Medellín, obviando el debido proceso que debe informar a toda investigación disciplinaria, fiscal o penal, decidió publicar un boletín de prensa para poner en la picota pública a un investigado y así mostrar “positivos” en la estrategia de lucha contra la corrupción (Boletín de prensa No. 1059 de 2006 de la Alcaldía de Medellín).
El discurso anticorrupción es un expediente taquillero para conseguir niveles de aceptación, pero su impacto es realmente inocuo y hace parte del menú de falsas estrategias contra la corrupción administrativa.
Si poner en la picota pública fuera un remedio eficaz debiera enviarse un boletín de prensa por cada investigación que se inicie. Pero, obviamente, ese es un camino errado porque atenta contra los derechos al debido proceso, al buen nombre, a la honra, a la intimidad, a la presunción de inocencia y no le hace mella alguna a la corrupción.
Este camino de crecer en popularidad con la deshonra ajena genera imagen de administración “sagrada”, pero lo hace parada en los derechos de una persona investigada, no condenada.
No hay duda que el Estado debe investigar y promover la lucha contra la corrupción. Pero en esa lucha no se vale de todo. Donde haya mérito para investigar que se investigue, pero de ahí a utilizar un indicio o un testimonio para mostrar resultados anticorrupción hay mucho tramo.
Los procesos son reglados y con garantías procesales que no se pueden desconocer por los anhelos faranduleros o las demandas de primicias de los periodistas o medios de comunicación.
La política del escarmiento público, de escandalizar, de guerra preventiva contra la corrupción tiene efectos colaterales gravísimos en los derechos fundamentales de las personas y muy bajo impacto en el control de la corrupción. El corrupto sabe que el ruido sirve para ocultar, para desviar la atención.
Si esa es la política que ha escogido la Alcaldía, la del escarnio público, ¿por qué, entonces, no se difunden todas las investigaciones en boletines de prensa? Empezando por las del Alcalde y siguiendo por las de los Secretarios de Despacho. Porque no se debe hacer ni con ellos ni con ninguna persona, porque ese recurso es un abuso de poder que tiene limites en los derechos fundamentales de las personas, incluso de las investigadas.
Crecer y ganar aceptación con el pellejo ajeno ha sido una metodología de esta administración desde sus momentos electorales. La honra y el buen nombre son derechos universales, son para todos; no puede ser que con la apertura de investigación la Administración Municipal de por sentada una condena.
Ese sistema de difamación no lo aplica la Alcaldía a otros casos mayores, no lo usó en los contratos y acciones de la Administración que generaron dudas como la consultoría contratada por Epm con Teletraining Ltda. para justificar la privatización (llamada pomposamente escisión) de telecomunicaciones, para que se realizara un trabajo que ya se había hecho, o al desistimiento en favor de particulares de una demanda con pretensiones por $610 mil millones de pesos, o a la compra de una empresa obsoleta de telecomunicaciones de larga distancia por U.S. 85 millones al grupo Santodomingo.
El negativo síndrome de los falsos positivos no es más que un camino mezquino en el cual el poder del Estado es usado para ser duros y directos con los débiles pero pianito y sinuoso con los fuertes.
Medellín, 3 de octubre de 2006
(*) Director del Consultorio de Derechos y Gobernabilidad háBeas corpus
El Gobierno Nacional sacrifica Generales que no son de su cuerda cuando se presentan escándalos en la Fuerza Pública, pero guarda silencio, habla de infiltraciones y perdona a quienes comulgan con sus prácticas autoritarias.
El Ejército de Colombia tiene el monopolio legítimo de la fuerza, pero no tiene el monopolio de los falsos positivos. Por ejemplo, la Administración Municipal de Medellín, obviando el debido proceso que debe informar a toda investigación disciplinaria, fiscal o penal, decidió publicar un boletín de prensa para poner en la picota pública a un investigado y así mostrar “positivos” en la estrategia de lucha contra la corrupción (Boletín de prensa No. 1059 de 2006 de la Alcaldía de Medellín).
El discurso anticorrupción es un expediente taquillero para conseguir niveles de aceptación, pero su impacto es realmente inocuo y hace parte del menú de falsas estrategias contra la corrupción administrativa.
Si poner en la picota pública fuera un remedio eficaz debiera enviarse un boletín de prensa por cada investigación que se inicie. Pero, obviamente, ese es un camino errado porque atenta contra los derechos al debido proceso, al buen nombre, a la honra, a la intimidad, a la presunción de inocencia y no le hace mella alguna a la corrupción.
Este camino de crecer en popularidad con la deshonra ajena genera imagen de administración “sagrada”, pero lo hace parada en los derechos de una persona investigada, no condenada.
No hay duda que el Estado debe investigar y promover la lucha contra la corrupción. Pero en esa lucha no se vale de todo. Donde haya mérito para investigar que se investigue, pero de ahí a utilizar un indicio o un testimonio para mostrar resultados anticorrupción hay mucho tramo.
Los procesos son reglados y con garantías procesales que no se pueden desconocer por los anhelos faranduleros o las demandas de primicias de los periodistas o medios de comunicación.
La política del escarmiento público, de escandalizar, de guerra preventiva contra la corrupción tiene efectos colaterales gravísimos en los derechos fundamentales de las personas y muy bajo impacto en el control de la corrupción. El corrupto sabe que el ruido sirve para ocultar, para desviar la atención.
Si esa es la política que ha escogido la Alcaldía, la del escarnio público, ¿por qué, entonces, no se difunden todas las investigaciones en boletines de prensa? Empezando por las del Alcalde y siguiendo por las de los Secretarios de Despacho. Porque no se debe hacer ni con ellos ni con ninguna persona, porque ese recurso es un abuso de poder que tiene limites en los derechos fundamentales de las personas, incluso de las investigadas.
Crecer y ganar aceptación con el pellejo ajeno ha sido una metodología de esta administración desde sus momentos electorales. La honra y el buen nombre son derechos universales, son para todos; no puede ser que con la apertura de investigación la Administración Municipal de por sentada una condena.
Ese sistema de difamación no lo aplica la Alcaldía a otros casos mayores, no lo usó en los contratos y acciones de la Administración que generaron dudas como la consultoría contratada por Epm con Teletraining Ltda. para justificar la privatización (llamada pomposamente escisión) de telecomunicaciones, para que se realizara un trabajo que ya se había hecho, o al desistimiento en favor de particulares de una demanda con pretensiones por $610 mil millones de pesos, o a la compra de una empresa obsoleta de telecomunicaciones de larga distancia por U.S. 85 millones al grupo Santodomingo.
El negativo síndrome de los falsos positivos no es más que un camino mezquino en el cual el poder del Estado es usado para ser duros y directos con los débiles pero pianito y sinuoso con los fuertes.
Medellín, 3 de octubre de 2006
(*) Director del Consultorio de Derechos y Gobernabilidad háBeas corpus
9 comentarios:
Temas como este deben ser tratados por todos los medios de comunicación, buscando la construcción de una cultura fundamentada siempre en la verdad. Reflexiones que rescaten la credibilidad. Saludos y muchas gracias
Ramiro Uribe Piedrahita
La corrupción también se disfraza de anticorrupción. Mala cosa que Fajardo tome un pelafustanillo para mostrar su lucha contra la corrupción.
Que caigan los peces gordos.
Inés Elvira Restrepo
SIN LUGAR A DUDA RESULTA INTERESANTE Y POR QUE NO INQUIETANTE EL LEERTE
COMO SERIA DE INTERESANTE QUE TE PUSIERAS POR UN MOMENTO EN EL PAPEL DE GOBERNANTE Y COMO GLOSA A TUS COMENTARIOS DIERAS SOLUCIONES CONCRETAS Y PRACTICAS PARA QUE ESTE O CUALQUIER GOBIERNO APRENDA A GOBERNAR
GRACIAS POR TUS ESCRITOS
Que bueno Rafael que te pronunciaste sobre este hecho tan cochornoso; sólo faltó el ¡Crucifíquenle, crucifíquenle!
Helena
De nuevo, me queda el honor de ser tu lector. Lo felicito por la claridad de su pluma. Gracias por el contenido.
Un cordial saludo
Efren
Respetado Dr Rincon:Me permito ofrecerle mis agradecimientos por enviarme la columna en mencion,espacios de reflexion como estos,con unos mensajes altruistas nos enriquecen para ser mas proactivos de la realidad nacional,la cual los grandes grupos economicos nos las quieren terviversar y ocultar a base de telenovelas,partido,realitys etcUna vez mas mil gracias por su deferencia.Soy Medico y Cirujano General y actualmente realizo una Especializacion en economia y finanzas y cada semana impromo el yesquero y la reparto entre mis compañers Su servidor y amigo Misael Cadavid
y que de lo relacionado con las licitaciones publicas, como la que a fuera quieren realizar en medellin con eñ Metroplus, despues de haberse dado una orden presidencial que fuera adjudicada directamente con pliego de condiciones a los transportadores. ¿sera que alli hay gato encerrado? cuando la ley autoriza que esta adjudicacion se puede hacer cobijado por las normas. y que podemos decir de los fondos que se quieren implementar a y ser administrados por el ente público? será que quieren ponerle paticas a esa platica? este sera otra puerta que se abrirá para la corrupción?
y que de lo relacionado con las licitaciones publicas, como la que a fuerza quieren realizar en medellin con el Metroplus, despues de haberse dado una orden presidencial que fuera adjudicada directamente con pliego de condiciones a los transportadores locales. ¿sera que alli hay gato encerrado? cuando la ley autoriza que esta adjudicacion se puede hacer cobijado por las normas. y que podemos decir de los fondos de racionalización que se quiere implementar y ser administrados por el ente público? será que quieren ponerle paticas a esa platica? este sera otra puerta que se abrirá para la corrupción? quieren convertirlos en Bogotá con el sofisma de mejorar y con la cantidad que se dio administrar, que son muchisimos millones de pesos, no se han querido invertir, solo quedo en la administración de estos dineros.
Era de esperarse que éste escándalo, surgiera ad-portas del receso parlamentario próximo, para que el montaje de difuminación sea elaborado a la perfección, y entrados de vacaciones, haya todo un mamotreto de justificacónes y retractaciones, que mantengan sedada la capacidad de reacción de los colombianos, y mediante otro éscandalo que impajaritablemente vendrá, estos personajes salgan impunes y sus beneficiarios sigan campantes en el ruedo político, sin perder ningún voto, antes por el contrario, Rafael,su buena intención de denunciar estas lamentables situaciones, termine siendo apología involuntaria para otros de esa nefasta estirpe.
Saeta
Publicar un comentario